La percepción de que los precios de la vivienda han tocado suelo se extiende en España, afirman los registradores de la propiedad. Este hecho ha reactivado una demanda "que durante los últimos años estaba a la espera" de que los precios de los pisos siguieran bajando, y como consecuencia de esta mayor demanda, los precios vuelven a subir. Esta tendencia, que ya empezó a verse en el 2014, se ha intensificado durante el primer semestre del presente año, según reflejan las estadísticas publicadas ayer por el Colegio de Registradores de la Propiedad y por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
El precio de la vivienda en España subió el 5,12% de media en el segundo trimestre del 2015 respecto al mismo periodo del año anterior, y un 2,80% respecto al primer trimestre del 2014, sostiene el último informe de los registradores. Son unas tasas de crecimiento muy superiores a las registradas hace un año (cuando se crecía a un ritmo del 2,65% interanual y un 1,88% trimestral), lo que vendría a corroborar la mejora del sector. En cualquier caso, los precios aún se encuentran un 29% por debajo de su pico máximo que se alcanzó en plena burbuja del ladrillo, en el tercer trimestre del 2007.
El Colegio de Registradores advierte de que la recuperación no es homogénea en toda España, y que aún hay zonas donde los ajustes pueden continuar. Por el contrario, Cataluña, Madrid, Baleares, Canarias y la Comunitat Valenciana concentran "las zonas de mayor interés inmobiliario".
RAZONES DEL REPUNTE
Los bajos tipos de interés, el alargamiento de los plazos de los créditos hipotecarios (23 años) y la mejora en general del mercado hipotecario contribuyen a la recuperación del sector, según los registradores.
Las hipotecas sobre viviendas encadenan 13 meses de ascensos, según el INE. En junio, el número de hipotecas inscritas (21.454 en total) se disparó el 26,3% respecto al mismo mes del 2014 y un 8,7% respecto al pasado mayo (primer incremento mensual en un mes de junio desde el 2011). Aragón lideró el repunte en términos porcentuales, ya que los créditos hipotecarios crecieron un 59%.
El importe medio de las hipotecas aumentó en el conjunto de España el 4,2% respecto al año anterior, hasta alcanzar los 103.626 euros. El tipo de interés medio, al inicio, fue del 3,35%, frente al 3,88% de junio del año pasado.
