La prima de riesgo de España, que mide el diferencial entre el bono español a diez años y el alemán del mismo plazo, comenzaba la sesión en 350 puntos básicos, prácticamente los mismos con los que cerró la víspera, pendiente de la subasta que celebra hoy el Tesoro español, la primera del año. La rentabilidad del bono español a diez años era a esta hora del 5,32 %, en tanto que el rendimiento del bono germano se situaba en el 1,83 %.

Varios factores presionan de nuevo el mercado de deuda soberana europea, como el aviso de la agencia de medición de riesgos Fitch sobre una mayor participación del Banco Central Europeo (BCE), las enésimas dudas sobre la quiebra de Grecia y la inminente bancarrota de Hungría.

Además España, que encara hoy su primera emisión de deuda del año, cuenta desde ayer con una nueva advertencia de Fitch, que ha alertado de que existe un alto riesgo de que rebaje la nota de la deuda soberana española.

Las primas de riesgo de otros países de la zona del euro comenzaban la jornada del mismo modo que la española, apenas un punto básico por debajo del cierre anterior. La de Grecia se situaba en 3.305 puntos básicos, la de Portugal, en 1.092, la de Italia, que acude hoy a los mercados por primera vez en 2012 para intentar colocar 12.000 millones de euros en deuda a corto plazo, en 515, y la de Francia, en 134.

Los seguros de impago de deuda (credit default swap o CDS) relativos a los bonos a diez años de España para cubrir la posibilidad de impago de 10 millones de dólares se cambiaban a esta hora a 406.111 dólares anuales, por encima de los 385.000 de ayer.

Por último, los contratos de futuros que se negocian sobre la deuda europea caían hasta el 139,24 %, desde el 139,35 % previo, mientras que los que predicen el comportamiento de la deuda estadounidense parten hoy desde el 143,25 %.