Los comités de empresa de la térmica de Andorra y de las minas de carbón turolenses se concentraron ayer a las puertas de la planta para exigir el mantenimiento de los 500 empleos directos e indirectos que dependen de la central. Por ello, exigieron a Endesa que realice las inversiones necesarias para desnitrificar la térmica y al Gobierno que garantice el futuro del carbón nacional.