Las rebajas más extrañas de la historia llegan a su fin. Y han sido raras no porque los descuentos no hayan sido mayoritarios, sino porque la liberalización por ley de esta tradición de consumo bianual ha provocado que los consumidores no sepan ni cuándo empiezan ni cuándo acaban. En cualquier caso, donde si hay coincidencia en el sector es que el buen tiempo ha hecho que las ventas de ropa hayan sido buenas, alrededor del 3%-4% superiores a las del año pasado, según la mayoría del sector.

Por ley, las tiendas aragonesas y españolas ya pueden hacer rebajas todo el año, o en el momento de este en que lo consideren necesario. Desde el sector se recomienda mantener, sin embargo, los dos periodos de rebajas habituales. Así lo defiende, por ejemplo, la Federación de Empresarios de Comercio y Servicio de Zaragoza (Ecos), que reclama un cambio de la normativa para «volver a la situación anterior». «Hasta que no se modifiquen la normativa y se vuelva a los periodos fijos, las rebajas no serán lo que eran. Se han diluido y han perdido su virtulidad», aseguró ayer Vicente Gracia, secretario de esta patronal.

A pesar del la liberalización, el pequeño comercio trata de mantener las fechas tradicionales de rebajas, es decir, los meses de julio y agosto en verano. Sin embargo, la confusión que se genera ha hecho que este periodo de descuenta haya perdido peso en la cuenta de resultados de las tiendas, según Ecos. «No se han cumplido las expectativas», asegura Gracia. «Esto no favorece -añade- ni al comercio ni al consumidor, que está desorientado».

El balance de las ventas en estos meses de verano «es muy similar» al año anterior, señalan desde Alejandro Moda, uno de los comercios de referencia de la ciudad de Zaragoza. «Lo que sí se ha notadoes que esta vez el consumo ha sido muy irregular. Hemos contado con días en los que había muchísima afluencia en las tiendas, no coincidiendo necesariamente con el fin de semana, y otros días han estado muchísimo más tranquilas, sin responder a un patrón concreto. Esto antes no pasaba», apunta Vanessa Til, responsable de Comunicación de esta firma.

REACTIVACIÓN

En las grandes superficies, el balance es más optimista. «Se han cubierto las expectativas en moda y se han superado en productos de hogar», aseguran fuentes de El Corte Inglés de Zaragoza, que destacan el éxito que ha tenido el plan renove de electrodomésticos.

El pequeño comercio estima asimismo que la evolución del negocio en lo que va de año no está siendo mala. «El principio del año fue algo flojo pero después ha habido un cierto repunte en primavera y verano», a juicio de la federación Ecos. El periodo clave será a partir de ahora. «Como comunidad de interior que somos, la parte final del año es en la que más ventas se concentran», sostiene Gracia.