Sostenible medioambientalmente y con acuerdo social. Son las bases sobre las que Red Eléctrica Española (REE) quiere dar forma a la futura interconexión con Francia a través del Pirineo aragonés, sabedor de los recelos --sobre todo entre colectivos ecologistas-- y las complicaciones técnicas que entraña un proyecto de tal calado. Por el momento se siguen sin conocer muchos detalles sobre esta línea de alta tensión --de 400 kilovoltios (kV)--, al margen de que ha sido declarada de interés comunitario por la Unión Europea, que financiará su construcción. La cifra de inversión prevista, de unos 1.000 millones de euros, da una idea de la envergadura de la iniciativa, sin duda, una de las mayores obras que acoja la comunidad en la próxima década.

En un encuentro con la prensa celebrado en Madrid, la compañía confió ayer en iniciar la tramitación de esta gran infraestructura eléctrica el próximo año. Antes, debe proponer el itinerario más idóneo. En el mejor de los casos, las obras comenzarán en el 2019 y dos años después la línea entraría en servicio.

"Seguimos haciendo análisis y estudios, pero sigue sin haber un trazado decidido. Queremos que sea un proyecto que cumpla con los máximos criterios medioambientales y que tenga la mayor aceptación social", explicó José Ignacio Lallana, delegado de REE en Aragón. La línea contará también, agregó, con "la mejor tecnología" de transporte eléctrico y se prevé que sea parcialmente soterrada para mitigar el impacto ambiental, siguiendo así el modelo de la interconexión con Francia por Gerona, que se puso en servicio hace medio año.

Al margen de este proyecto, Red Eléctrica invertirá en Aragón 170 millones de euros en diversas infraestructuras a lo largo del periodo 2015-2020, tal y como marca la planificación energética fijada por el Gobierno central. En concreto, el pasado año desembolsó en la región 24,739 millones, el 6% del total de España.

MEZQUITA-MORELLA La principal actuación de este lustro, con 99 millones de inversión en territorio aragonés, es la construcción de dos líneas de alta tensión que unirán Teruel y Castellón por el Maestrazgo (Mezquita-Morella y Mudéjar-Morella), cuyas obras se prevén finalizar en el último trimestre del 2016. "Hemos tenido algún retraso por el temporal de nieve, pero se está trabajando para recuperar el tiempo perdido", señaló Lallana. Se trata del mayor proyecto en ejecución que está llevando a cabo REE en toda España.

Sobre el desmantelamiento de la frustrada línea Aragón-Cazaril, como reclamó recientemente las Cortes, el operador del sistema eléctrico precisó que no hay ninguna sentencia que obligue a ello. REE ha propuesto reutilizar parte de estos apoyos para la conexión Peñalba-Isona por razones de "eficiente económica y siempre que medioambientalmente sea posible".