El PSOE anunció ayer que va a presentar un escrito al Fiscal General del Estado (FGE) para que se investigue los 8.700 correos de Miguel Blesa, expresidente de Caja Madrid, y se aclare "cuáles han sido las relaciones" de este con la familia de José María Aznar. "Las comunicaciones --publicadas por los medios-- podrían revelar delitos societarios y de tráfico de influencias por las presiones de la familia Aznar al señor Blesa", señaló el portavoz socialista de relaciones institucionales, Antonio Hernando.

Según su opinión, los correos publicados revelan hasta qué punto Caja Madrid tuvo una "intervención política gravísima". En declaraciones a los medios en el Congreso de los Diputados, el dirigente socialista defendió que "no puede pasar un día más" sin que la Justicia "intervenga e investigue la correspondencia entre la familia Aznar y el señor Blesa". El diputado del PSOE defendió que esta comunicación electrónica podría ser constitutiva de "distintos tipos de delitos" societarios y, "desde luego, de tráfico de influencias", y muestra además "hasta qué punto Caja Madrid ha tenido una intervención política por parte de sectores muy importantes del PP y, en concreto, del expresidente del Gobierno Aznar".

Los correos en cuestión forman parte de los 8.700 emails requeridos por Elpidio José Silva (el juez que lo encarceló), al exbanquero. De esos mensajes se puede desprender que el entorno de José María Aznar y el propio expresidente del Gobierno intentaba aprovechar su influencia en la caja para adquirir la obra del pintor Gerardo Rueda, amigo del propio Aznar, que falleció en 1996.

"Puede que seas muy joven para entenderlo: algún día no te explicarás haber escrito este mensaje. Yo nunca me arrepentiré de haber actuado así, la caja tienen sus procedimientos, no es mi cortijo. A tu padre nunca le ha decepcionado la seriedad y honestidad de un amigo". Esta es la respuesta dada por Miguel Blesa a José María Aznar Botella, hijo de Aznar el 16 de julio del 2009. El mensaje, en todo caso, parece el punto final al proceso por el que la Caja Madrid debía adquirir la obra del amigo de Aznar y construir un museo para exponerla en un edificio propiedad del Ayuntamiento de Madrid. Los herederos del artista pedía a la caja 56 millones por la obra, pero el proyecto llegó a alcanzar los 100 millones.

"Con los pelos que se ha dejado por ti y han sido muchos, meparece impresentable lo que hashecho o no has hecho", le dijo elhijo de mayor de José María Aznar a Miguel Blesa en un SMS que el expresidente de Caja Madrid reenvió a su correo electrónico. "No se merecía esta decepción", continuaba el mensaje recibido en julio de 2009. José María Aznar Botella, entonces con 31 años, reprendía al amigo de su padre porque la caja de ahorros que presidía gracias a su intermediación había rechazado un proyecto impulsado por Aznar.

OPOSICIÓN AL PROYECTO

En todo caso, Blesa contó con la oposición al proyecto del director de la Fundación Caja Madrid, Rafael Spottorno, hoy jefe de la Casa Real. Según publica El País y eldiario.es Spottorno calificó el proyecto impulsado por Aznar como "innecesario e inabordable".

No fue solo el hijo de Aznar quien presionó a Blesa por el mismo proyecto. La exconcejal del PP y consejera de Caja Madrid, Mercedes de la Merced --fallecida en mayo pasado-- le envió un correo a Blesa sobre el tema: "Miguel ¿qué tal? Estoy en La Paz, Bolivia, me dice el alcalde que Aznar está triste por la negativa de Caja Madrid a su proyecto. Alberto también está molesto. ¿No se puede retomar? ¿Quién lo vetó? ¿Puedo hacer algo?". H