Ronal Ibérica, compañía dedicada a la fabricación de llantas de automóvil, está estudiando una segunda fase de ampliación de la nueva factoría de Teruel, lo que supondría una inversión cercana a los 50 millones de euros y la creación de unos 80 nuevos empleos. El director de la planta turolense, Dominik Wiederhold, desveló ayer estos planes a los medios de comunicación tras la visita a la actual planta de la consejera de Economía, Industria y Empleo del Gobierno de Aragón, Marta Gastón, a la que explicó los detalles de la ampliación.

La multinacional suiza ya ha comenzado las obras para trasladar toda la producción a una nueva planta que se instalará en Platea, la plataforma logístico e industrial de Teruel, en la que se invertirán 47 millones de euros y que se espera que esté operativa en el primer trimestre del 2017. De las 24 hectáreas que el grupo comprará, 16 se destinarán a la implantación industrial y las ocho restantes, a futuras ampliaciones. En la primera fase se crearán una decena de puestos de trabajo pero, de confirmarse la segunda fase de la ampliación, el número de empleos sumaría otros 80. En total, el responsable de la planta cuantificó unos cien millones de euros de inversión y 90 nuevos puestos de trabajo.

MÁS DE 500 TRABAJADORES

En la planta de Ronal, que se instaló en el polígono La Paz de Teruel hace 30 años, trabajan actualmente 432 personas --además de otro centenar a través de empresas de trabajo temporal, según apuntaron fuentes del comité de empresa--. Esta plantilla produce 2,5 millones de llantas de automóvil al año, cifra que, con la ampliación en Platea, aumentaría hasta los tres millones de piezas y cubriría así el incremento de la demanda que ha registrado por la recuperación del sector del automóvil. Por eso, su peso económico y laboral en la provincia turolense se compara con el de General Motors (GM) en Zaragoza.

Esta ampliación responde a la mejora del sector de la automoción y a "la confianza en la planta" que tiene el grupo multinacional, afirmó Wiederhold, quien señaló que la ampliación servirá para introducir "nuevos diseños y máquinas más rápidas y renovadas". "Seguimos creando empleo en Teruel, esperamos que otros 30 años más", añadió. Todo dependerá, no obstante, de "la resolución de la solicitud de subvenciones y la decisión del grupo", matizó, según si opta por ampliar finalmente la planta de Teruel o alguna otra del grupo. En todo caso, indicó, esta segunda fase no llegaría hasta el 2018 o el 2019.

Por su parte, la consejera de Economía, Marta Gastón, mostró la disposición el Ejecutivo a "colaborar con esos nuevos expedientes y solicitudes", por lo que desde el Gobierno de Aragón se dará "soporte para la solicitud de los incentivos regionales que desde Madrid se conceden", afirmó. En este sentido, la consejera recordó que la Unión Europa marca un "tope" como límite máximo de ayudas públicas que puede recibir una empresa y "ahí entrará el Gobierno de Aragón a complementar", añadió.