El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha garantizado que la transición energética será «justa» y que llevará a cabo mediante un proceso dialogado con los agentes sociales. Sánchez hizo esta promesa, ayer, durante su intervención en Oviedo en un acto con motivo de sus primeros cien días de Gobierno, en el que ha incidido en la apuesta de su Ejecutivo por la justicia social.

El presidente del Gobierno afirmó que el proceso de transición energética también va a ser «dialogada» con los agentes económicos y sociales con el objetivo de que no ponga en riesgo el empleo de las regiones afectadas por la minería ni la competitividad industrial.

Los próximos meses serán decisivos para conocer cómo se articula la nueva estrategia del Gobierno socialista en esta materia. De momento, las zonas afectadas, entre las que figura la comarca de Andorra, están a la expectativa.