El Santander ha logrado cerrar la ampliación de capital que lanzó para comprar el Popular con una demanda 8,29 veces superior a las acciones ofertadas. Los inversores han pedido 58.600 millones de euros en títulos, cuando el banco presidido por Ana Botín solo quería captar 7.072 millones de euros, aportados mayoritariamente por sus actuales accionistas (99,259%). La entidad fijo un precio de 4,85 euros por acción, con un fuerte descuento del 17,75% sobre su valor teórico. Pese a ello, el grupo sostiene que es el precio «más ajustado» de las ampliaciones para financiar compras de más de 3.000 millones de los últimos diez años.