Si la tecnología ha revolucionado el día a día de las personas (internet, móviles...), también está cambiando un sector tan tradicional como el de la alimentación. Así lo pone de manifiesto la feria Alimentaria, que muestra cómo las mejoras en maquinaria y elementos como el big data están cambiando la manera de cultivar/fabricar productos. Mientras, el consumidor tiene cada vez más oportunidades para usar los nuevos gadgets para alimentarse de manera más sana. Aunque algo tan básico como el cultivo sigue siendo una actividad a veces tradicional, muchos son los elementos tecnológicos que se están incorporando. Por ejemplo, drones que sobrevuelan los campos y analizan qué zonas necesitan más agua o pueden sufrir plagas.
