Después de que la «alianza presupuestaria» del Partido Popular y sus seis socios permitiera el pasado 31 de mayo la aprobación en el Congreso de los Diputados de las cuentas del 2017, el Gobierno debe volver empezar ya mismo a llamar a la puerta de los grupos políticos en busca de nuevos pactos que compensen la falta de mayoría parlamentaria del PP.

En las próximas semanas y meses el Gobierno debe cocinar sucesivos pactos políticos con las comunidades autónomas (para el reparto de los objetivos de déficit) y con los grupos políticos, para la aprobación de los objetivos de estabilidad, de los Presupuestos del 2018, de la reforma de las pensiones, de la financiación autonómica, de los órganos reguladores y de la reforma hipotecaria, entre otras cuestiones.

Son, al menos, seis citas económicas que, como los seis personajes del dramaturgo italiano Luigi Pirandello, buscan un autor, en forma de un pacto político que les conceda entidad.

Las cartas quedarán marcadas por las decisiones que emanen del congreso federal del PSOE, los días 17 y 18 de junio, que debe ratificar el nuevo liderazgo de Pedro Sánchez. El congreso socialista del próximo fin de semana dará pistas sobre el alcance que tendrá el lema de Sánchez del «no es no» en cada una de las futuras negociaciones.

COMUNIDADES AUTÓNOMAS

<b>CONSEJO DE POLÍTICA FISCAL Y FINANCIERA </b>3 En la tercera o cuarta semana de junio se debe celebrar una reunión del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, con los responsables autonómicos de Finanzas en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF). En esa reunión se debe debatir el reparto del objetivo de déficit del 2018, del 2,2%, entre los distintos niveles de la Administración (Estado, autonomías, ayuntamientos y Seguridad Social) pues este es el primer paso previo a la elaboración de los presupuestos estatales y autonómicos.

En principio, el Programa de Estabilidad 2017-2020 asigna un objetivo de déficit autonómico del 0,3% para el 2018 (el 0,7% para el Estado). La reunión del CPFF será un primer test para valorar la sintonía, o no, entre la nueva Ejecutiva socialista de Sánchez y sus barones autonómicos, más favorables a buscar acuerdos con Hacienda que garanticen la gestión en sus comunidades.

TECHO DE GASTO

<b>CONSEJO DE MINISTROS DEL 30 DE JUNIO </b>3 Tras las reuniones previas de Hacienda con ayuntamientos y autonomías, el Consejo de Ministros debe aprobar -previsiblemente el 30 de junio- el reparto de los objetivos de déficit para el 2018. En esa reunión el Gobierno debe aprobar el techo de gasto para los Presupuestos del 2018. También es probable que en esa cita el Consejo de Ministros valore revisar el cuadro macroeconómico para volver a elevar al alza la previsión de crecimiento de la economía en el 2017, desde el 2,7% actual hasta el entorno del 3%.

Un día antes, se espera que el BOE haya podido publicar la ley de Presupuestos del 2017, que será la primera ley en ver la luz después de un año y medio sin que el Gobierno del PP haya logrado sacar adelante ninguna de ellas.

El nuevo reparto de objetivos de déficit deberá ser sometido a la votación del pleno del Congreso de los Diputados a mediados de julio. Ahí se verá si el Gobierno vuelve a contar con su «alianza presupuestaria» de siete partidos (PP, Ciudadanos, PNV, Foro Asturias, UPN, Coalición Canaria y Nueva Canarias) que le sirvió para salvar las cuentas del 2017.

PRESUPUESTOS DEL 2018

<b>SEPTIEMBRE, MES CRUCIAL </b>3 Si el Gobierno saca adelante en el Parlamento la aprobación de los objetivos de déficit a mediados de julio -y por ende, el techo de gasto-, Hacienda podrá empezar a confeccionar el proyecto de Presupuestos que debería ser presentado en el Congreso antes del 1 de octubre. Montoro destinará septiembre a ultimar los acuerdos que garanticen la posterior aprobación del proyecto presupuestario. Si en esas semanas el PP logra revalidar su alianza presupuestaria, el Gobierno podría tomar oxígeno para alargar la legislatura hasta mitad del 2019 (prórroga presupuestaria mediante para ese año).

PENSIONES

<b>EL PACTO DE TOLEDO </b>3 Los trabajos de la Comisión del Pacto de Toledo avanzan despacio. Este es uno de los temas capitales de negociación para los que se entiende que es preciso el consenso de todos los grupos parlamentarios y, de forma imprescindible, de los dos mayores: PP y PSOE. Estas negociaciones quedarán fuertemente determinadas por las directrices que emanen del Congreso Federal del PSOE y del equipo del nuevo líder, Pedro Sánchez.

FINANCIACIÓN AUTONÓMICA

<b>SIN PISTAS SOBRE LOS CRITERIOS SOCIALISTAS </b>3 El ministro de Hacienda ha recordado estos días al PSOE la tarea pendiente de negociar el nuevo modelo de financiación autonómica que el Gobierno querría que ya tuviera reflejo en las cuentas del Estado del 2018, que se tramitarán en otoño. En esta cuestión, el Gobierno se haya especialmente despistado respecto a las posibles directrices negociadoras que aplicará el PSOE. Sobre todo, si se tiene en cuenta la falta de sintonía inicial entre la mayoría de los barones del PSOE y Pedro Sánchez.

EL NEGOCIADO DE GUINDOS

<b>ÓRGANOS REGULADORES Y LEY HIPOTECARIA </b>3 La reforma de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia y, en general, de los órganos reguladores había sido encauzada por el ministro de Economía, Luis de Guindos, con los grupos de Ciudadanos y del PSOE. También la nueva ley hipotecaria, que pretende introducir mayores garantías a favor de los titulares de estos créditos bancarios.El cambio en el PSOE introduce una incertidumbre total sobre la negociación de estos proyectos de ley cuya tramitación, previsiblemente, será ralentizada.