El número de accidentes de trabajo está creciendo progresivamente en Aragón y España tras los duros años de la crisis, pero el repunte es mayor incluso al del crecimiento de la riqueza y del empleo. Los sindicatos UGT y CCOO creen que esto se debe en buena medida al incremento de la precariedad del empleo que ha traído consigo la reforma laboral del PP. Para hacer frente a esta lacra, ambas organizaciones consideran urgente derogar esta polémica norma e incrementar los efectivos de prevención de riesgos tanto los de la administración central (Inspección de Trabajo) como de la autonómica (ISSLA).

Así lo pusieron de relieve ayer en una jornada informativa con motivo del Día Internacional de la Seguridad Social y Salud en el Trabajo -que se conmemora hoy- celebrada en el Centro de Historias de Zaragoza bajo el lema Trabajo seguro. Es tu salud, es tu derecho, donde se dieron cita más de 300 delegados sindicales. El acto inaugural contó con la participación de la directora general de Trabajo de la DGA, Soledad de la Puente, y los líderes regionales de UGT, Daniel Alastuey, y de CCOO, Manuel Pina.

La falta de formación, la temporalidad y los contratos parciales no deseados provocan una alta rotación en un mismo puesto, lo que acaba incrementando la siniestralidad, según Luis Clarimon, secretario de Salud Laboral de CCOO Aragón. «Los trabajadores jóvenes son los que sufren con mayor virulencia los accidentes de trabajo y las enfermedades profesionales», aseguró.

RIESGOS PSICOSOCIALES

Desde la aprobación en el 2012 de la última reforma laboral, la siniestralidad laboral se ha incrementado en un 16% en la comunidad aragonesa, según datos de los sindicatos. En el 2018 se mantiene esta tónica: un 4,2% más, hasta 4.538 accidentes (3.798 en jornada laboral y 560 al ir y volver del trabajo) en un primer trimestre «negro». José de las Morenas, responsable de este área en UGT Aragón, lo calificó así porque además el número de muertes ha pasado de 9 a 11 respecto al mismo periodo del 2017, es decir, un repunte del 22,2%. El 50% de estos fallecimientos fueron por causas no traumáticas como infartos e ictus, por lo que reclamó a los servicios de prevención prestar más atención al estrés y los riesgos psicosociales en el trabajo. Por sectores, la industria lidera el repunte de los accidentes, con un 12,7% más, seguida de construcción (8,1%) y servicios (3,7%).

Ambos sindicatos denunciaron que existe una déficit de recursos humanos y técnicos para hacer frente al problemas de la siniestralidad laboral. Por ello, reclamaron al Gobierno central que dote de más personal a la Inspección de Trabajo y de la Seguridad Social en la comunidad, donde ahora cuenta con un vigilante por cada 21.485 trabajadores, una proporción que en países como Francia es de la mitad. En la misma línea, reclamaron al Ejecutivo autonómico una mayor dotación económica para el Instituto Aragonés de Seguridad y Salud Laboral (ISSLA), que ofrece apoyo técnico y orientativo en materia de prevención.

MÉDICOS CENTINELA

UGT y CCOO creen que la siniestralidad está aumentando por la falta de aplicación y control de la normativa al existir una «insuficiencia» de inspectores y, sobre todo, por la externalización de la prevención por parte de las empresas. «La Inspección de Trabajo debe ser un bastión en esta lucha», aseguró De las Morenas.

Respecto a la Estrategia Aragonesa de Seguridad y Salud en el Trabajo 2017-2020, pactada el pasado año con la DGA y los agentes sociales, los sindicatos confiaron en que se pongan en marcha algunas de las novedosas medidas que recoge el plan, como una red de «médicos centinela» que haga aflorar las enfermedades profesionales o el mayor control de los servicios de prevención para que no se ejerzan como subcontratas. «Es una herramienta útil pero las empresas tienen que tomar las medidas oportunas para que los trabajadores estén seguros», aseguró Clarimon, quien ensalzó la labor de los sindicatos en esta materia: «En las empresas donde estamos presentes la siniestralidad baja».