El Gobierno Berlusconi anunció ayer nuevos cambios en el plan de ajuste, entre los que, además de la "regla de oro", destaca la subida del IVA del actual 20% al 21% y la reintroducción de un tributo a las grandes fortunas. En el primer borrador ya estaba prevista, pero posteriormente se eliminó. Ayer, el Gobierno volvió a recuperarla aunque más limitada. Ahora se trata de un impuesto del 3% para las rentas de más de 500.000 euros. Según el ministro de Finanzas, Giulio Tremonti, hay 3.641 italianos que superan esta fortuna.

También se ampliará la edad de jubilación de las mujeres en el sector privado, fijada actualmente en los 60 años y que a partir del 2014 se alineará con la de los hombres, situada en los 65.