Existen aplicaciones móviles para medir y analizar la actividad física, para encontrar nuestras canciones favoritas y para ayudarnos a ahorrar. ¿Por qué no tener una para examinar nuestro sueño y mejorar así la calidad del descanso? Pikolin ha lanzado un colchón inteligente, denominado SmartP!K, que combinado con una pulsera y una aplicación móvil mide y analiza el sueño para mejorar la calidad del descanso.

Grupo Pikolin presentó este proyecto innovador ayer, en Madrid, de la mano de la directora de Comunicación, Ana Robledo, el responsable de Innovación y Desarrollo, César Isac, y el cofundador de Geeksme, Ángel Sánchez. Al acto acudieron también rostros conocidos como Manel Fuentes, Sandra Barneda, Lourdes Montes y Ara Malikian, imagen de la campaña.

SmartP!K es un sistema de descanso digital integral compuesto por un colchón y una pulsera inteligente, ambos con diversos sensores que registran y envían datos a una aplicación móvil. Está disponible tanto para iOs como para Android. Estos sensores miden y analizan datos importantes para mejorar la calidad del descanso como la temperatura de la habitación, las fases del sueño, los movimientos al dormir o el ritmo cardíaco.

La aplicación móvil recoge y procesa esos datos en tiempo real, a través de Bluetooth y cuenta con tres funcionalidades. La función Sueño informa de forma diaria de las fases del sueño y su calidad, Amor analiza de forma divertida la actividad sexual y Coach ofrece una guía personalizada para el cliente y propone retos para mejorar el descanso. En este sentido, posee un programa de 21 días que permite al usuario realizar un seguimiento de sus logros y le aconseja y le hace recomendaciones en el caso de que se produzcan desviaciones de los objetivos planteados.

Fabricado en Zaragoza

Este nuevo producto está fabricado en las instalaciones que Grupo Pikolin tiene en Zaragoza, ha sido fruto de una inversión de casi 3 millones de euros y un largo proceso de investigación y se comercializará desde hoy en España y Portugal. La empresa española Geeksme, especialista en el internet de las cosas, también ha intervenido en el desarrollo técnico del sistema.

El nuevo colchón de Pikolin se ha fabricado en diferentes medidas y tiene un precio de venta recomendado que no supera los 600 euros en el producto de 135 por 190 centímetros.

«Este es un primer paso en la introducción del internet de las cosas en el colchón. Esta tecnología nos permite múltiples posibilidades de futuro, especialmente para colectivos como ancianos y niños», explica el responsable de Innovación y Desarrollo de Pikolin, César Isac. Y es que la firma ya está trabajando en la siguiente versión del producto para hacerlo extensible a otros targets, según aseguran fuentes de la firma aragonesa.

Grupo Pikolin facturó 430 millones de euros en el 2016, un 8% más que el año anterior. La empresa aragonesa cuenta con diez plantas de producción, de las cuales tres se ubican en España.