Los clientes del hipermercado de Alcampo en Valdefierro que preparaban los banquetes de Navidad se frotaban los ojos el pasado día 22 de diciembre. En sus manos tuvieron carne embandejada con el sello de calidad de Ternasco de Aragón pero cuya etiqueta de trazabilidad reflejaba que el animal había nacido y había sido engordado, sacrificado y despiezado en Irlanda. Según la Unión de Consumidores de Aragón (UCA), la confusión partió de un "error" por parte de la cadena de distribución a la hora de atribuir la procedencia de la carne, ya que el propio Consejo Regulador de esta Indicación Geográfica Protegida (IGP) así lo ha reconocido.

Según la UCA, representantes del Consejo Regulador de la IGP se personaron en el establecimiento y comprobaron que era un error en el etiquetado, pero que el producto era Ternasco de Aragón y que el precio se correspondía con el del mercado, por lo que la organización de consumidores considera que "no existe fraude para el consumidor, ni en el precio ni en la calidad". De todos modos, la UCA ha remitido la información a la Dirección General de Consumo del Gobierno de Aragón.

Sin embargo, algunas fuentes del sector ponen en duda esta versión. Una organización agraria, que también fue alertada de la confusión, acudió al día siguiente con un abogado y un veterinario para tomar cartas en el asunto, pero las bandejas equivocadas habían desaparecido de los lineales. "La carne supuestamente irlandesa estaba allí el domingo a las 21.30 horas, y el lunes a la hora de abrir ya no había ni rastro de ellas. Cuando menos, es sospechoso", señalan. Este diario intentó sin éxito ponerse en contacto con Alcampo.