La multinacional Toro Gips producirá yeso desde la localidad turolense de Albalate del Arzobispo a partir de junio del 2018. La empresa, constituida el pasado 23 de junio con un capital social de dos millones de euros, invertirá 11 millones y creará 30 puestos de trabajo para su nueva planta, que comenzará a construirse el próximo mes de septiembre. La sociedad está constituida con capital australiano, holandés, alemán y turco como socios principales.

Uno de los fundadores de Toro Gips, Erdem Kütükcü, y la consejera de Economía del Gobierno de Aragón, Marta Gastón, se reunieron ayer en Zaragoza para ultimar los detalles de esta operación que ya avanzó el presidente de Aragón, Javier Lambán, a finales del mes de junio.

La nueva fábrica de Albalate del Arzobispo se dedicará a la transformación de residuos del alabastro, particularmente de yeso, procedente de un yacimiento de 7.000 hectáreas y tendrá una capacidad productiva total de 250.000 toneladas anuales. Sin embargo, Erdem Kütükcü matizó ayer que comenzarán a producir «al 25 o 30% de la capacidad» hasta el 2020, cuando tienen previsto trabajar a pleno rendimiento.

El yeso resultante podrá ser utilizado en la industria de la construcción, para la elaboración de pigmentos, la alimentación o los fertilizantes, entre otros sectores. Además, el producto se exportará a diez países, entre ellos Alemania, Holanda, Bélgica, Francia, Portugal, Italia, Estados Unidos y algunos de África.