En el sector de las energías renovables se ha vivido cierto alivio al dejar, por ahora aparcada, la regulación del autoconsumo --aquellos que se producen sus propios kilowatios kWs, propia electricidad--, que preveía cargos que se han bautizado como un "impuesto al sol".

La Fundación Renovables celebra que el Gobierno haya aplazado la aprobación del Real Decreto. A su entender es un texto "perverso" ,contrario a la democratización de la energía. Se han pronunciado en contra de esta normativa desde patronales hasta UGT y CCOO.

Los más críticos argumentan que la regulación prevista penalizaba el desarrollo de esta fórmula que priman otros países europeos. Un total de 18 partidos políticos firmaron el manifiesto Un compromiso de la sociedad a favor del derecho cívico al autoconsumo de energía. Entre los firmantes están desde el PSOE, ICV e IU hasta Ciudadanos o Podemos. No están en cambio el PP o CDC. La mayoría de la oposición entiende que el planteamiento del Gobierno tiene como fundamento el reconocimiento de la inalterabilidad de los costes del sistema eléctrico en vez de considerar las ventajas sociales, económicas, ambientales y para la red de una mayor penetración del autoconsumo.

Las eléctricas, en cambio, opinan que todo el mundo que tenga la opción de conectarse a la red general debe contribuir a cubrir sus costes. Y, en especial, si pretende hacer negocio con ello. A. S.