Los jóvenes aragoneses quieren trabajar en el campo, están convencidos de que el sector agrario tiene futuro y no les faltan líderes que les ayuden a conseguir sus objetivos. Desde ayer, el turolense Marcos Garcés Lizama, de 29 años, es el nuevo coordinador de las Juventudes Agrarias de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), a la que pertenece UAGA. La elección tuvo lugar durante la IX asamblea de este colectivo, que se celebra este fin de semana en Lorca (Murcia).

Garcés, corresponsable de los jóvenes de UAGA junto con Ferdinand Cookson, coge así el relevo de otro aragonés, Toño Romé --que ha pasado a formar parte de la Ejecutiva de COAG--, por lo que su misión es "continuar con la misma línea de trabajo" que inicio su compañero, de "defensa de la actividad agraria como sector estratégico para cualquier país y para mantener el medio rural, y de mejora de la imagen y el prestigio del sector". En la consecución de estas metas los jóvenes "juegan un papel clave", según Garcés, que trabajará por promover el relevo generacional que necesita el campo y lograr el apoyo de las instituciones para alcanzarlo.

Garcés es agricultor y ganadero profesional en Bañón (Teruel). Allí cultiva cereal de secano (parte de agricultura ecológica) y también gestiona una granja de porcino. Licenciado en Sociología, estudia Ciencias Políticas "por gusto" y reconoce que trabajar con su padre en el campo le permite "seguir aprendiendo cada día", aunque pronto asumirá la gestión de la explotación familiar. Por eso ha sufrido las dificultades a las que se enfrentan los jóvenes que quieren trabajar en el sector agrario. "No tenemos acceso a la tierra, hay muchas trabas burocráticas, falta formación e información, la inversión económica necesaria es muy alta y empezar de cero es casi imposible. Por eso las ayudas a la incorporación son vitales", afirma.

En su opinión, la avalancha de solicitudes que viene recibiendo la DGA en los últimos años está motivada en parte "por la crisis, ya que ven una salida laboral ante la enorme tasa de paro juvenil que hay en España", pero "también hay muchísima gente con vocación".