Mal tiempo para el campo aragonés. Si en enero y finales de abril fueron las heladas las que echaron a perder la producción de verdura, ahora es la sequía la que augura una mala campaña de cereal de invierno. UAGA estimó ayer una reducción del 36% en la cosecha de este cultivo en Aragón y alertó de los daños irreparables que está causando la ausencia de lluvias en las zonas de la margen derecha del río Ebro.

La cuenca del Jiloca es el área más afectada por la falta de precipitaciones, una circunstancia que se lleva repitiendo año tras año y que va a provocar «cosechas nulas» en muchas de las parcelas de cebada, trigo y avena, entre otros, según avisó ayer el sindicato agrario que se desplazó hasta la zona para visibilizar el problema que arrastran los agricultores desde hace tiempo.

Precisamente el Alto Jiloca es «la zona de España en la que más han descendido las precipitaciones» en los últimos tiempos, recuerda el secretario general de UAGA, Juan Manuel Penella, que hace alusión a los datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

Por este motivo, el sindicato se reunirá próximamente con los alcaldes de los municipios de la zona y el delegado del Gobierno de Aragón en Teruel para «examinar de forma científica» la situación climatológica de esta área y analizar si la zona puede declararse «zona de desastre por sequía reiterada». De esta manera, los agricultores podrían recibir ayudas para paliar las pérdidas causadas por la escasez de precipitaciones.

BUENA PRODUCCIÓN EN hUESCA / No obstante, UAGA prevé una «cosecha desigual» en la comunidad. Las zonas de la margen izquierda del río Ebro, como las Cinco Villas o los Monegros registrarán una producción «normal» si se tienen en cuenta campañas anteriores.

Huesca incluso registrará una cosecha «por encima de la media» con la recogida de más de 500.000 toneladas de cereal. Las lluvias del mes de marzo, que alcanzaron los 80 litros en muchas zonas, consiguieron salvar la campaña en la provincia oscense.

De forma general en Aragón, el sindicato pronostica una recogida de 1.159.000 toneladas de cereal cuando la media de los 15 últimos años se sitúa en 1.300.000 toneladas y el 2016 se registraron 1.800.000 toneladas de este cultivo.

UAGA subrayó ayer que los seguros agrarios no solucionan las pérdidas provocadas por la sequía en la margen derecha del Ebro, ya que estos están poco extendidos ya que no cubren la producción y su coste es elevado.