Hace unas semanas celebramos la X edición de la Feria de Tiendas Virtuales de Aragón, haciendo un repaso del cambio que ha protagonizado el comercio electrónico en una década, lo que corresponde a medio siglo cuando se trata de internet, un largo camino que en palabras de Ricardo Lop "comenzamos con un montón de carencias y hemos ido aprendiendo de los errores".

En aquellos comienzos numerosos comerciantes interpretaban que lo suyo, (ropa, zapatos, jamones, muebles...) no tendría cabida en la venta on line, y no se percibía como amenaza o competencia esa posibilidad. Otros comerciantes vislumbraron una gran oportunidad, un gran mercado a un clic de distancia, y se pusieron manos a la obra. Tampoco muchos ciudadanos creyeron que las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) les cambiarían costumbres de vida.

Hoy, una década después, las compras por internet superan los 15.000 millones de euros en España y el avance en los sectores como la moda, el equipamiento del hogar o la alimentación son los que más incrementan el porcentaje cada año. Si comparamos los millones de ciudadanos enganchados en el último decenio el resultado es exponencial.

COMO LA VENTA on line, al fin y al cabo es una venta, se trasladan las mismas modas y eventos, como la Semana de Internet que antecede al Día de Internet el próximo 17 de mayo. Cabría preguntarnos en qué sentido se puede celebrar un Día de Internet cuando la mayoría de la sociedad no podría estar un día sin Internet, ni por ende el comercio electrónico.

El sentido nos lo ofrece la Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información del 2005, en la que se constató la necesidad de contribuir a que se conozca mejor internet para que se convierta en un recurso mundial verdaderamente accesible al público. Este Día de Internet debe servir para dar a conocer mejor las posibilidades que puede ofrecer el uso de las TIC a las sociedades y economías, y a las diferentes formas de colmar la brecha digital, que aún existe entre territorios, entre personas y entre empresas.