El expresidente de Volkswagen Martin Winterkorn se ha salido finalmente con la suya. Al menos en su aspiración de convertir al grupo alemán en el nuevo rey mundial del sector de la automoción. Aunque Winterkorn se enfrenta a investigaciones por su papel en el escándalo de los motores diésel trucados y por los impuestos que pagó, ha podido ver cumplido su objetivo de desbancar a Toyota como el primer fabricante mundial de vehículos.

El cambio en el trono mundial del automóvil se produjo el año después del estallido del diéselgate, con lo que se demuestra que el fraude no ha tenido apenas efectos en las ventas del gigante alemán en todo el mundo. Quizá por eso, el grupo que preside Matthias Müller no celebró en público la nueva meta lograda. Sin embargo, el escándalo sí ha afectado a los resultados de Volkswagen con provisiones millonarias que merman su rentabilidad frente a la de Toyota, que es más alta.

PRIMERA VICTORIA PARCIAL / Winterkorn tuvo que dejar el cargo en septiembre del 2015 por el escándalo del trucaje de los motores, pero con la miel en los labios al haber logrado una primera victoria parcial que llevó a Volkswagen a superar a Toyota de forma temporal en el primer semestre del 2015. La marca japonesa recuperó la corona a final del 2015 pero la cedió en el 2016.

Cuando parecía que Volkswagen estaría más debilitada por el diéselgate, superó por 137.000 vehículos a Toyota en el 2016, al vender 10.312.000 unidades (un 3,8% más) frente a los 10.175.000 del grupo presidido por Akio Toyoda (un -0,2%).

Las claves del cambio de liderazgo en la industria automovilística después de cuatro años de dominio del grupo japonés se deben a una combinación de factores como, por ejemplo, una menor demanda en Estados Unidos del Toyota Camry, el modelo estrella de la marca en un mercado importante para la compañía. Si a eso se le une un pinchazo relativo de las ventas de Toyota en China, al crecer solo el 8,2%, se explica la pérdida del liderazgo.

En cambio, las marcas del grupo alemán, que incluyen a Seat, siguieron creciendo incluso en Europa, con un 4% más, y especialmente en China, su primer mercado, con un 12,2% más.