Zaragoza ha consolidado la recuperación del mercado de la vivienda hasta convertirse en una de las capitales españolas más activas en el segmento de obra nueva, en el que alcanzó las 800 unidades comercializadas el pasado año. Esto la convierte en la tercera, por detrás de Madrid y Barcelona, con más ventas, según el último informe elaborado por la consultora inmobiliaria CBRE. Esta compañía augura un mayor crecimiento en los próximos años a la vista de la demanda existente y del incremento de la actividad promotora, que cerró el pasado año con casi un centenar de proyectos en curso o precomercialización. Todo ello, en un contexto de subidas moderadas del precio y con la novedad de un emergente negocio en la rehabilitación y el alquiler de pisos.

La capital aragonesa ha salido así del largo letargo en el que entró el ladrillo durante la crisis. El ritmo de ventas se situó en el 2017 en 2.000 viviendas al trimestre, el doble que en los años más duros de la recesión. «En obra nueva hay un amplio camino por recorrer», auguró Miguel Ángel Gómez Rando, director de CBRE en Zaragoza. Durante el boom inmobiliario se llegó a 4.000 por trimestre, el 45% de ellas de nueva construcción, un porcentaje que ahora es del 12%.

A pesar de esta reactivación, la consultora no ve por ahora señales de una burbuja. El incremento de precios en obra nueva en Zaragoza es «sano» (por debajo del 5%). El pasado año la subida fue del 3,5%, hasta superar los 2.000 euros por m² de superficie útil en la gran mayoría de barrios o zonas de la capital.

Promotores nacionales

Gómez Rando auguró, asimismo, el desembarco de promotores nacionales, cuya presencia ahora es discreta. «Tienen que llegar», aseveró. Este tipo operadores, en su mayoría socimis (sociedades cotizadas de inversión inmobiliaria), requieren suelos para edificar inmuebles de más de 100 viviendas, algo que hoy ofrecen principalmente el barrio del AVE y Arcosur. Este último será, detalló, una de las zonas que más «cambiará de cara» en dos o tres años con nuevas promociones. La oferta de obra nueva se concentra actualmente en Miralbueno y Parque Venecia, así como en el Arrabal (Camino del Vado) y Universidad-Romareda.

En zonas más céntricas como el Casco Histórico, donde la oferta de vivienda a estrenar es muy pequeña, CBRE pronostica una dinamización del mercado del alquiler y la llegada de operadores especializados en este negocio. De hecho, la consultora tiene constancia de la compra de un inmueble por parte de una socimi con este fin, además de dos edificios en la calle Alfonso que se están reformando para destinarlos a alquiler turístico y corporate. También prevé un aumento de proyectos de rehabilitación, en muchos casos para hacer edificios de usos mixtos, como va a ocurrir con el hotel Meliá y con la antigua sede de la CAI.

El auge del arriendo responde a varios motivos. Desde la dificultad de encontrar vivienda nueva en las zonas de más demanda «a la limitada capacidad de ahorro de los jóvenes», lo que complica sus opciones de compra al requerir en torno al 30% del valor del piso, explicó Samuel Población, director de Residencial y Suelo de CBRE. También se está produciendo, agregó, un cambio de mentalidad en España sobre esta modalidad, que actualmente representa el 23% hogares frente al 33% de la media europea.