Pablo Echenique ve cómo se le complica la presidencia del Gobierno. La decisión de CHA, anunciada por su portavoz, José Luis Soro, de apoyar al candidato socialista, Javier Lambán, le pone las cosas complicadas en su aspiración. "Está claro que numéricamente es más complicado", dijo ayer en conversación telefónica. Pero advierte al PSOE que el respaldo de Podemos "no es gratis" y que todas las opciones están encima de la mesa.
Las declaraciones del líder de la formación violeta añaden un grado más de dureza a las conversaciones que su partido está manteniendo con el PSOE. "Las negociaciones están yendo bien, estamos satisfechos", indicó. Conforme se vaya avanzando Podemos definirá su posición en la sesión de investidura, que de momento no está clara. "Nosotros no somos Ciudadanos; si no se apoyan las medidas que hemos puesto en el decálogo iremos hasta el final, no tenemos ninguna prisa y no apoyaremos a los socialistas así como así, ahí está el ejemplo de Andalucía", advirtió.
Sobre la posibilidad de que CHA se sume a la mesa de negociaciones, Echenique señaló que su posición no es radicalmente en contra. Dejó la puerta abierta a esa posibilidad, aunque recordó que él mismo propuso a Soro negociar, y que este declinó sentarse. "No entiendo por qué ahora quieren unirse, no le veo la lógica", subrayó. En cualquier caso, manifestó que los nacionalistas "ya han cerrado un pacto con Lambán, lo van a apoyar y quieren entrar en su Gobierno. Nosotros no estamos en esa línea, hablamos solo de investidura y nada más".
Podemos, avanzó, no va a cambiar su estrategia. "Nuestras condiciones están sobre la mesa desde el principio. Queremos hablar de medidas concretas y no de sillones porque no nos fiamos del PSOE", admitió. Insistió en que su objetivo es que los socialistas cambien sus políticas y rechazo que las propuestas que figuran en su decálogo sean imprecisas. "Leo los documentos del PSOE y CHA y veo muchas declaraciones de intenciones nada más. Nosotros hemos trabajado con técnicos y juristas para formular las medidas y son perfectamente realizables. Me sorprende que se nos acuse de poco concretos".
En opinión de Pablo Echenique, si existe una voluntad "real" el documento podría estar visto en "tres o cuatro sesiones". Es decir, esta misma semana. "Vamos a buen ritmo, pese a las prisas que tienen algunos", aseguró. De hecho esta misma semana podría verse el decálogo entero, y solo quedaría hacer el documento final para la investidura.
