Ciudadanos celebró ayer su aterrizaje exprés en toda España, donde se ha convertido en la tercera fuerza municipal en votos en su primera convocatoria electoral. Según los datos provisionales, el partido naranja también ha entrado en todos los parlamentos autonómicos menos el de Navarra. Pero no todas las expectativas que tenía Albert Rivera se han cumplido totalmente. Esta campaña, el presidente de Ciudadanos ha reclamado el apoyo de los electores para propiciar un "cambio sensato" y ser bisagra en plazas clave en las que, finalmente, no lo han conseguido, como es el caso del consistorio de Valencia. Con el resultado tan ajustado en el ayuntamiento y la comunidad de Madrid, sin embargo, anoche no se podía descartar que fuera determinante y que pudiera sumar con el PP de Esperanza Aguirre y Cristina Cifuentes.

Uno de sus principales objetivos, colocarse como tercera fuerza municipal, se ha cumplido. Con el 96,46% de los votos escrutados, el partido naranja sacó 1.416.478 papeletas y 1.505 concejales (por delante de IU, con poco más de un millón). La dirección considera clave esa red local como primera fase de implantación para seguir creciendo en las elecciones generales de finales de año.

Rivera organizó a principios de año un comité de acuerdos poselectorales que los próximos días analizará los posibles pactos para favorecer la gobernabilidad. La decisión que tome deberá ser validada por el comité ejecutivo, es decir, por Rivera. El compromiso del presidente de Ciudadanos es no entrar en ningún ejecutivo, municipal o autonómico, que no presida pero sí favorecer la investidura o los presupuestos si es necesario.

LAS CONDICIONES

A cambio de ese apoyo, como se ha encargado de subrayar en la campaña, el partido naranja exigirá a la otra formación varias condiciones, entre otras, que no tenga imputados en sus filas y que esas organizaciones celebren en primarias para elegir a sus candidatos.

Es el mecanismo que la dirección de Ciudadanos ha encontrado para "objetivar" esos posibles pactos, explicaba Rivera estos días atrás cuando se le preguntaba directamente si sería capaz de mantener al PP en la capital de Madrid, con Aguirre como alcaldesa.

Anoche, los análisis de los líderes tardaron en llegar por la lentitud del recuento y lo ajustado de los resultados. José Manuel Villegas, jefe de campaña, celebró el resultado global y el "poder municipal" pero pidió tiempo para analizar los datos.