Pablo Echenique sigue manteniendo el pulso con el PSOE aragonés. El líder de Podemos, a falta de que se inicien las conversaciones formales, aspira a presidir la comunidad autónoma. Eso sí, como punto de partida, ya admite que su partido no entrará en un Ejecutivo de los socialistas y capitaneado por Javier Lambán. A partir de ahí, todo está "abierto". Incluso apoyar la investidura de Lambán, "si se dan ciertas condiciones". No especificó cuáles.

El primer contacto se producirá este próximo lunes en el Parlamento autonómico, donde Lambán y Echenique tomarán un café alrededor del mediodía. "No es el inicio de las negociaciones, que llevará otra gente, sino un encuentro inicial", puntualizó ayer por la tarde el líder de Podemos. La formación morada reunió en su sede zaragozana, en pleno casco histórico, a su dirección y al consejo ciudadano autonómico. Se analizó la campaña electoral y los resultados que ha obtenido el partido en Aragón --14 diputados--.

Echenique se mantuvo firme en la postura ya esgrimida durante estos días: aspira a la presidencia con el argumento de que cualquier cambio en Aragón pasa solo por Podemos. Aunque, eso sí, dejó la puerta abierta a la entrada de socialistas a un eventual Ejecutivo liderado por él: "Habría que discurtirlo", dijo. Él no entrará si el presidente es Javier Lambán. Pero su posición fue algo más flexible, en cuanto a que no negó la posibilidad de apoyar al candidato del PSOE --el más votado y el que tienen más escaños (18)-- si "se dan ciertas condiciones".

Pero como punto de partida, todo parece posible a día de hoy, a tenor del discurso de Echenique. Alcanzar la presidencia es una opción que nadie debe desdeñar y que se pondrá sobre la mesa, tal como dijo ayer el líder de Podemos. El candidato del partido morado aseguró que tiene claras "las cosas que hay que hacer en Aragón, que son urgentes y que hay que hacer ya". E insistió en que para "aumentar las posibilidades de cambio debería haber un gobierno de Podemos". "Yo, como siempre, asumiré la responsabilidad que eso conlleve", remarcó, al tiempo que añadió que no se ve a sí mismo "en un lugar o en otro", pero sí se ve "haciendo medidas para mejorar las condiciones de vida de los aragoneses".

El líder de Podemos en Aragón advirtió que, en estos momentos, es "imposible" saber los puntos de conflicto que puede tener su partido para negociar con los socialistas. Y aprovechó para lanzar varios reproches a los que pueden ser dentro de poco sus socios circunstanciales. Recordó que las políticas que el PSOE ha llevado a cabo hasta ahora "no han defendido los intereses de la mayoría" de la población en las últimas legislaturas socialistas ni en España ni en Aragón. Citó, a modo de ejemplos, que el PSOE pactó con el PP para reformar la Constitución --Lambán ya admitió que había sido un error--, se han hecho recortes sociales en sanidad y educación; reformas laborales que han disminuido los derechos de los trabajadores y que, "en todos esos puntos", Podemos puede "chocar" con el PSOE. "Depende más de un cambio de políticas del PSOE que de lo que podamos decir nosotros", señaló Echenique.

Pese a los juegos de florete, el líder de Podemos es consciente de que está llamado a entenderse, en un sentido u otro, con Lambán. El lunes se da un primer paso. Luego vendrán otros, para concretar un acuerdo que terminará llegando.