Mis años de instituto

(Jaime Cabeza, 2º de Bachillerato IES Francés de Aranda de Teruel)

Quién me iba a decir a mí que me iba a dar pena acabar el instituto. Pues sí, me da pena, y bastante. Por supuesto que los que nos vamos tenemos ganas de empezar la universidad, conocer gente, salir (sobre todo salir). Y es que el mundo universitario es una pasada, y tenemos muchísimas ganas de meternos en él. Sin embargo, es como si estuviésemos dejando pasar 6 años de nuestra vida, 6 años madrugando, yendo a clase y escuchando a profesores contarnos muchas cosas, cosas que a veces interesaban, y muchas otras no.

Los adultos decís todos que la vida del estudiante es la mejor. Yo, no me lo creo. Eso sí, está claro que se vive muy bien, no te voy a decir que no. Pero al fin y al cabo, echarle tantas horas de codos al estudio no nos gusta, ni a los estudiantes ni a nadie, y por eso nos apetece tanto ir a la universidad, donde aunque se siga estudiando, es un cambio de aires que nos viene muy bien. Además, supuestamente estudias algo que más o menos te gusta.

Está claro que el instituto te gusta más cuando has acabado, sin embargo la vida del instituto te marca. Allí pasas toda tu adolescencia, ¿cómo no te va a marcar? Los amigos del instituto duran toda una vida. Con ellos has compartido lo mejor y lo peor: juegos en clase, risas, deberes, exámenes, viajes…

Pues sí, me da pena irme. Parece como si fuera ayer que llegamos al instituto, unos niños de Primaria con muchas ganas de comerse el mundo y sintiéndose tan mayores por ir ya al instituto. Quién nos iba a decir que eso acababa de empezar, y sin darte cuenta, se acabaría tan pronto.

Por mucha pena que nos dé irnos, esto es así. La vida no para aunque necesitas una pausa, ni te puedes bajar del mundo como decía Mafalda. Todo llega y todo pasa, y eso es así. Disfruta de la vida, de tus años en el instituto, que aunque luego te parezca que no, los echarás de menos, y con razón. Porque será una de las mejores etapas de tu vida.

EL FIN DE UNA LACRA SOCIAL

(Bárbara Morlans, Alumna de 1º de ESO Colegio Romareda)

La violencia de género es algo horrible que hace sufrir a muchas personas. En ocasiones, no pensamos sobre ello porque no nos ha ocurrido. Pero tanto si nos pasa algún día, como si no, hay que luchar contra este tipo de violencia.

Hay personas que sufren mucho y pasan muy malos ratos. Niños que quedan huérfanos, sin madre, sin padre o sin los dos. Chicas jóvenes que empiezan a sufrirla con sus novios.

Todas estas personas, necesitan saber que no están solas, que todos juntos lucharemos contra la violencia de género denunciándola.