—¿Cuántos años llevas patinando y cómo empezaste?

—Desde pequeñita veía en la tele los patinajes y me encantaban. Con tres años me pusieron mis primeros patines y desde entonces sigo patinando. Dije que quería patinar y me apuntaron. En mis primeras clases lo pasé fatal porque dije: «Esto no es como en la tele y esto no puedo hacerlo yo», pero al final me esforcé más, y hasta ahora.

—Al ponerte los patines, ¿qué es lo que más te enganchó?

—Es como una manera de expresarte y hace que te olvides de todo por un momento. Patinando me siento libre y puedo hacer lo que quiera.

—¿Cómo son las competiciones?

—Los entrenos son de una hora y 45 minutos y están los saltos, las piruetas, etcétera. Luego hay competiciones a nivel de Aragón. En un año podemos tener tres o cuatro. Son tres minutos en los que tienes que darlo todo para poder demostrar lo que has hecho en tus entrenamientos. Te preparas un baile que tienen unos cuantos componentes que hay que sacar y que dependen de la categoría y de lo que seas capaz de hacer. Ahora tengo que hacer dos piruetas combinadas y tres saltos dobles.

—¿Cada cuánto se suele cambiar de ejercicio?

—Depende de la persona. Hay algunas que se pueden pegar dos años con la misma coreografía y otras igual en tres meses se sacan una y ya tienen que ir cambiando porque les sale. Hay cinco niveles que son el D, C, B, A y Certificado. Esos ya me los he sacado y ahora tengo que seguir con más dificultad. Lo siguiente ya son las categorías. Hay otra modalidad también que es el show, que es patinaje en grupo.

—¿Cuáles son los principales logros que has conseguido?

—Desde pequeña me he quedado varias veces en el podio hasta que acabé los primeros test. En la modalidad de show, con el Stadium Casablanca llevamos siendo campeonas de Aragón unos cinco años. Se me ha quedado una espinita clavada por haber llegado al podio pero no haber ganado. También hemos estado en tres campeonatos de España. Dos de ellos fueron en Madrid y otro en Alcoy (Alicante). El primero fue un poco desastre porque nos quedamos fuera de las 20 mejores, en el segundo nos quedamos las sextas, que está bastante bien, y el último que hicimos, el de Alcoy, también fue un poco desastre.

—¿Cuál es tu sueño?

Mi sueño no es quedarme siempre en el podio o ser la mejor en todo, porque al final del todo te vale para decir: «Me he quedado la primera de Aragón o de España». Pero yo soy continua en mi trabajo diario. Hay muchas personas que, cuando no les sale una cosa, lo dejan y ya está. Hay mucha gente a la que le pasa eso, que cuando no les sale algo se quitan del patinaje, pero yo por ejemplo tengo días buenos y días malos, pero para mí lo más importante es que sigo intentándolo y que no me rindo nunca. Además, en el mundo del patinaje conoces a mucha gente y trabajar en equipo te hace trabajar mejor. Te hace aprender a valorar todo y los entrenadores te ayudan a confiar en ti mismo, que es lo más importante.

—¿El patinaje es un deporte muy sacrificado?

—Sí, porque además a estas edades ya se junta con los estudios o las ganas de salir y muchas veces antepongo el patinaje porque para mí es lo más importante.

—¿Has tenido muchos problemas con las lesiones?

—Sí, suelo tener un año bueno y otro malo. Me he roto el radio dos veces y me he fracturado dos veces el coxis. El pie me lo he fastidiado varias veces, he tenido varios esguinces, y en mis últimas lesiones, que fueron en verano, tuvo dos roturas de fibras que no me dejaban ni andar.

—¿Y este año es el bueno o el malo?

—Este es el bueno (risas).

—Antes has comentado que practicas una hora y 45 minutos. ¿Cómo son tus sesiones de entrenamiento?

—Entreno todos los días menos el miércoles. Los horarios son flexibles para que me dé tiempo a cumplir con los estudios. Primero hacemos un calentamiento normal en el que corremos, hacemos abdominales y estiramos, porque si no vienen las lesiones. Después empezamos a hacer saltos sin patines para coger la fuerza necesaria para luego hacerlo con patines. Quieras que no, cada uno pesa un kilo o más y se necesita mucha fuerza para hacerlo. Después ya con patines, calientas un poco y ya comienzan los saltos, las piruetas. Después hacemos el baile entero con todos los componentes para que a la hora de la competición salga bien.