Aragón y Sicilia compartieron historia durante más de 200 años bajo la Corona de Aragón. Esa unión dio como resultado un intenso intercambio cultural que ha quedado plasmado en la arquitectura de ambos territorios, que se desmarcó del estilo gótico mediterráneo imperante.

La exposición Un alma común, que se inauguró ayer en el Museo de Zaragoza --tras haber estado expuesta en Palermo, Siracusa y Roma-- revela las influencias arquitectónicas de la época que comprende desde 1282, "cuando Sicilia pidió ayuda a Pedro II para que les liberara del yugo francés", hasta 1516, "cuando muere Fernando El Católico", a través de 76 montajes fotográficos que recogen 46 edificios aragoneses y sicilianos, explicó uno de los comisarios, Aurelio Vallespín. Este subrayó que Un alma común "representa lo inefable". Así, a través de las fotografías se perciben "las influencias mutuas que se traducen en sensaciones difíciles de expresar".

PATRONES "MUY VISUALES"

Entre los edificios se pueden encontrar el Palacio de Los Luna en Illueca, la casa consistorial de Rubielos de Mora, el Palacio Ardiz de Alcañiz, el Palazzo Lanza de Siracusa y la Chiesa di Santa María dello Spasimo, pero ejemplos "muy visuales" de la relación entre la construcción aragonesa y siciliana se revelan en la arquitectura albalatina "que perfectamente podría estar en Sicilia por el color de la piedra" o la vinculación entre la parroquieta de la Seo y la capilla Palatina de Sicilia, que comparten la representación de "un paraíso bíblico en el que tienen cabida todas las culturas", indicó Vallespín. Existen también similitudes entre la techumbre de madera de la catedral de Teruel y la del palacio Steri de Palermo o entre las soluciones diseñadas para repartir el peso de la cubierta de las catedrales de Taormina y Mesina y la turolense.

Otro de los comisarios, Luis Agustín, reconoció que, gracias a la muestra, han descubierto cosas que les han sorprendido, como la aparición del escudo de la Corona de Aragón en fachadas sicilianas, el uso de las "bóvedas tabicadas" o el "río Ebro" en la Fuente de los cuatro ríos que se encuentra frente a la catedral dell'Assunta de Messina.

Esta muestra, enmarcada dentro del proyecto Corona de Aragón. Historia y Arte impulsado por el Gobierno de Aragón, recoge "las influencias constructivas, estilísticas y técnicas", así como "la influencia musulmana", señaló Dolores Serrat, consejera de Cultura del Gobierno de Aragón. Serrat añadió que esta iniciativa abre "la posibilidad de intercambios científicos" pero sobre todo hace "sentirnos orgullosos de lo que somos". Fruto del proyecto, "se van a poner en marcha becas Erasmus, una tesis doctoral y diversas investigaciones", remarcó Luis Agustín. Por otro lado, la Universidad de Zaragoza, está organizando Aragón y Flandes: Historia de un encuentro, que tendrá lugar en el Paraninfo.