El Ballet de Carmen Roche pone en escena hoy miércoles en el Tearo de la Estación, a partir de las 19 horas, el espectáculo Recreo, una pieza protagonizada por cuatro intérpretes que lleva al escenario a través de la danza un tema de rabiosa actualidad, un problema de siempre que sigue estando en las aulas: el acoso escolar. Coreografiado por Juan Carlos Toledo y con dramaturgia de Pau Cólera, el trabajo apuesta por un lenguaje actual, tanto coreográfico como comunicativo, en un espectáculo que profundiza en este conflicto y lanza un mensaje claro: se le puede poner fin.

La compañía de Roche, bailarina, maestra de bailarines y Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes 2012, que se encarga de la dirección del montaje plantea la idea de que el acoso es violencia y el peor enemigo es el silencio, es decir, la falta de apoyo a la víctima por parte de los que presencian la situación. Los expertos identifican a los compañeros, al grupo, como la figura clave para desactivar al acosador. Por eso la obra se basa en la figura del testigo (la gran mayoría de todos nosotros). Aquella persona o grupo que acompaña al acosador ignorando al acosado. Aquella persona en cuya mano está el cambio. Sin el testigo, la razón de ser del acoso se desvanece. El público será espectador, una vez más, de una situación de desigualdad en el ámbito del acoso escolar.

Cuatro bailarinas (María Dubarbie, Raquel Ferradás Veloso, Lydia Martínez Santín y Eva Nazareth) interpretan esta coreografía que apuesta por un lenguaje coreográfico actual. El proceso de creación partió de improvisaciones guiadas por el dramaturgo utilizando las propias experiencias de los intérpretes en el terreno del acoso escolar. A raíz de ello surgieron escenas y paisajes a los que el coreógrafo poco a poco ha ido dando forma para construir la pieza.