Campeones, la nueva comedia de Javier Fesser, refleja el contraste entre «el mundo de los listos, que buscan mil caminos para ser felices sin llegar a ningún lado, y el de los que ya lo son directamente», los discapacitados, muy capaces de «dar lecciones» y «alegrar» la vida a todos. Fesser (Madrid, 1964), ganador de seis premios Goya por películas como Mortadelo y Filemón contra Jimmy el Cachondo y Camino, ha «apostado» por una película que juega con la comedia y el sentimentalismo.
Campeones, que se estrena el viernes, relata la vida de Marco, el segundo entrenador de un equipo de la liga de baloncesto que, debido a un accidente por conducir ebrio, es condenado a hacer servicios sociales. «Obligado a entrenar un equipo de baloncesto formado por jugadores con discapacidad intelectual, al principio le parece un castigo; sin embargo, acaba siendo un lugar donde se encuentra a sí mismo», explicó ayer Fesser. El lunes participará en el Paraninfo en una sesión de La buena estrella, con Athenea Mata y la aragonesa Luisa Gavasa.
La película aborda «con naturalidad» el mundo de las personas con discapacidad intelectual y retrata a personajes que están «llenos de valores y son totalmente auténticos». Javier Gutiérrez da vida al entrenador de este equipo, cuyo elenco está formado por Sergio Olmo, Julio Fernández, Jesús Lago, José de Luna, Fran Fuentes, Gloria Ramos, Alberto Nieto Fernández, Roberto Chinchilla y Stefan López, quienes «jamás habían actuado antes».
DIFICULTAD AÑADIDA
«La dificultad de la película es que esos nueve protagonistas no conocían la dinámica de un rodaje. No obstante, que fueran personas con discapacidad intelectual ha sido una ventaja alucinante por la dosis de entusiasmo, ilusión y ganas que tenían», reveló.
Javier Gutiérrez ejerce el papel de un entrenador que «sufre» una evolución psicológica, y que pasa «de ser una persona encerrada en sí misma» a acabar siendo «otra diferente», debido al contacto con esos chicos. «No es un papel como cualquier otro: es una película muy especial en la que gano una experiencia vital y, además, amigos para toda la vida», aseguró. Por eso, ambos definieron este proyecto como un «canto a la vida y la amistad», que da visibilidad a ese colectivo, y afirmó que le encanta la «frescura» y el «efecto sorpresa» de trabajar con actores no profesionales, un «plus» de la película que hace que la comedia «venga sola».
Gutiérrez denunció la «grandísima ignorancia» sobre la realidad de este colectivo, que en ocasiones hace tener «cierto rechazo» o una «mirada complaciente» frente a esas personas. Sin embargo, según defendió, todo se cura desde «el acercamiento y la información».
