El cuadro del pintor asturiano Dionisio Fierros que reproduce un cláneo «puede ser la clave» para desentrañar la misteriosa desaparición de la cabeza del cadáver de Francisco de Goya. Así al mienos lo considera el director madrileño Samuel Alarcón, que ayer rodó imágenes de esa pintura para su documental Oscuro y Lucientes sobre la profanación de la tumba de Goya.

Al realizador le parece una «rareza» que ese cuadro esté guardado en un almacén del Museo Casa Natal de Jovellanos. La obra, que forma parte de una serie de calaveras y fue descubierto en 1828, presentaba una inscripción al dorso en el que podía leerse: «El cráneo de Goya pintado por Fierros en 1849».

Alarcón ha tomado esta pintura como punto de partida para intentar resolver los interrogantes del caso, entre ellos «¿quién encargó el cuadro?» y «¿Fierros expolió la tumba de Goya?».

En 1828, tras una agonía de trece días, Goya falleció a los 84 años en Burdeos y su cuerpo fue enterrado en el cementerio de La Grande Charteruse hasta que en 1888 pudo realizarse la exhumación de sus restos para que estos fueran trasladados a España.

Este es el punto de partida de Oscuro y Lucientes ya que, al abrir la lápida, se observó que la tumba había sido forzada y que el cráneo del pintor zaragozano había sido robado.

El equipo de rodaje trabajará estos días tomando imágenes de Gijón, Cudillero y Ribadeo para completar una historia que requirió cuatro años de investigación, según reconoció el director. El documental es una coproducción con Francia en la que participan las televisiones públicas RTVE y France 3, y cuenta con el apoyo logístico de la Film Commission del Principado de Asturia.

El cineasta madrileño, especializado en cine de vanguardia, realizó su primer documental en Roma, 3000 años de trabajo (2004) y, tras ser becado por la Real Academia de España en Roma, produjo su segundo largometraje, La ciudad de los signos (2009), un documental de creación sobre el también realizador Roberto Rossellini.

En 2006 inició junto a Javier Cardenete el proyecto Cartas que dura hasta la actualidad, y juntos fundaron en 2010 el colectivo Filmo, que produjo los cortometrajes de ficción, Los mundos lisérgicos (2011) y La caja de Medea (2012). Tras los terremotos de Lorca de 2011, Alarcón realizó junto con Carmen Latorre 4,5 5,1 (Crónica íntima de un terremoto) (2012).