Son películas muy diversas, que vienen de países muy lejanos, pero tienen algo en común, «son de excelente calidad» y están «hechas con amor por la tierra, el ser humano y la vida». Así lo manisfestaron Myriam López y Sonia Llera, jurados de Ecozine, al referirse al premio al mejor largometraje internacional del festival, que se llevó la película italiana Dusk Chorus, de Nika Saravanja, una tesis de escuela de una gran «belleza poética» sobre un italiano que va a la selva ecuatoriana a registrar los sonidos de la selva.

La gala de clausura (el festival no concluye hasta el 27) que tuvo lugar en el Teatro Principal reconoció también a Run (Colombia), de Francisco Rojas, como mejor corto de ficción; Birdlime (Canadá), de Even Rushie, como mejor corto de animación; Ishinomaki Rock’n roll city (Argentina), de Federico Aletta, como mejor corto documental; y Latitud 80º, de Guille Cascante, como mejor largo nacional.

En cuanto a la nueva sección, Ecozine Youth film festival, para escolares, se premió a Los ecomensajeros, del CEIP Pintor Sorolla (Yátova, España), Credit 1, del Centro Educativo The Mackay School (Chile) y El Botellín, del IES Llerena (Llerena , España). Y 2.247 jóvenes de Zaragoza y Pamplona dieron el premio del público joven al cortometraje de ficción Octubre otra vez (México), de Sofía Auza.

«GALANTERÍA CON EL CIELO» /

Uno de los momentos más emotivos de la noche fue cuando la hija de Berta Cáceres, Laura Zúñiga Fóres, entregó el premio al que da nombre su madre, a la Plataforma Salvemos la Montaña de Cáceres.

Zúñiga señaló que «es lindo traer la presencia de mi mami, Berta, que nos acompaña con su rebeldía y sus ganas de cambiar las cosas». De hecho, el premio Berta Cáceres Flores quiere ser «una llamada a la solidaridad de los pueblos» y de «alarma ante los graves problemas que a todos nos afectan», por eso, dijo: «Berta no murió, se multiplicó». El galardón recayó a un colectivo que se opone a las minas a cielo abierto, un movimiento ciudadano que nació en el 2017 con el objetivo de proteger el entorno natural de la Montaña de Cáceres, la Plataforma Salvemos la Montaña de Cáceres. «Que la fuerza y la rebeldía de nuestra ancestra os acompañe», concluyó la hija de la activista.

Eduardo Mostazo, Sonia Hurtado y Marichu León recogieron el galardón. Mostazo agradeció el premio a todos los que «luchan por defender la casa de todos, nuestra tierra, nuestro entorno natural» y recordó que «hay luchas en Salamanca, Ávila, Huesca, Asturias... León, por su parte, agradeció «la fuerza del ancestro, porque es mucha fuerza» y citó a Federico García Lorca y una frase que el granadino escribió para El público, para señalar que esta lucha es «galantería con el cielo, que se hace por un bien común, por amor a la tierra, por respeto a los seres humanos y a los seres vivos del planeta y se hace de forma desinteresada». Y este galardón «nos anima porque será una batalla muy larga».