Entre el Monasterio de Veruela, la ciudad mudéjar de Tarazona, el Campo vinícola de Borja, el Castillo de Trasmoz y el Moncayo se encuentra el Castillo de Grisel, una fortaleza gótica del siglo XIV que, en manos de su último propietario, Manuel Giménez, se ha convertido en un centro de turismo cultural.

El conjunto artístico Amalé/Bondía presenta en la sala de eventos que el castillo ha acondicionado para su nuevo fin, Infranqueable. 02., una exposición de fotografía recién llegada de su paso por el Instituto Cervantes de Burdeos. Los artistas, Almalé y Bondía, han sido recientemente galardonados con el Premio Fundación Aena de Fotografía 2011 y han expuesto en PhotoEspaña 2011. Los fotógrafos han recurrido esta vez a los espacios naturales de la frontera para continuar su particular construcción visual de una dramaturgia del paisaje. "Es un lujo de exposición", comenta Luis Zueco, responsable del castillo. La exposición podrá verse desde hoy hasta el 31 de agosto.

FIN CULTURAL Pero no es la primera vez que este encantador castillo acoge eventos de tipo cultural. En él se llevan organizando desde hace unos 20 años, conciertos, recitales y exposiciones. "El Castillo de Grisel es uno de los primeros sitios donde actuó Amaral; César Mesa, presentó su disco en 2008 y también hemos tenido exposiciones etnológicas y aquí tuvo lugar el I Recital de Poesía del Moncayo", cuenta el propietario. Además, ha sido utilizado localizaciones de cine, televisión y publicidad.

El castillo de Grisel fue propiedad del cabildo de Tarazona, pero con la desamortización pasó a manos privadas. De dueño en dueño fue comprado por Manuel Giménez, quien inició una paulatina remodelación que ha llevado a la antigua obra de sillería a ser uno de los castillos más importantes de la provincia de Zaragoza.

Luis Zueco afirma que "ahora se están terminando los detalles, pero hubo que hacer una reconstrucción muy potente y se ha conseguido recuperar el aspecto medieval de del castillo, que había sido utilizado como vivienda".

El Patio de Armas del castillo es la zona que recoge los espectáculos y recitales, por lo que se ha acondicionado un escenario para los eventos. También, aunque no está todavía terminado y se prevé que esté para finales de verano, el castillo se va a convertir en un "alojamiento con encanto", ya que se están adaptando las instalaciones para crear siete habitaciones, que "podrán alquilarse para eventos, grupos o familias", explica Manuel Giménez.

El edificio gótico está prácticamente restaurado, aunque aún queda remodelar parte de la entrada a través de un arco y una fase de la muralla para que que el Castillo de Grisel se convierta en uno de los pocos castillos que conserva la muralla perimetral en su totalidad.