Una abarrotada Iglesia de San Miguel fue ayer el escenario en el que la ciudad de Córdoba dio el último adiós al poeta Pablo García Baena (1923-2018), Premio Príncipe de Asturias de las Letras en 1984, fallecido el pasado domingo a los 94 años de edad. Con su muerte se apaga la última voz poética del grupo Cántico, un grupo de artistas surgido en la posguerra cordobesa y española, del que formaron parte Juan Bernier, Julio Aumente y Mario López.