«Era un sueño que siempre estaba en mi cabeza, trabajar en Hollywood», dice Anele Onyekwere, ingeniero musical nacido en Granada pero criado en Baza, de padre nigeriano y madre de Zújar. «Debe ser igual para todos los que nos dedicamos al cine, aunque he de admitir que el salto y el cambio no son nada fáciles». Onyekwere es músico, pero también es fan de la ciencia y de la informática. «La ingeniería musical parecía la combinación perfecta», nos dice desde Los Ángeles, donde trabaja desde hace unos años. Cuando acabó los estudios superiores en el conservatorio se formó en producción musical e ingeniería en el prestigioso Berklee College of Music, donde también estudió composición y producción de bandas sonoras.

Su campo de entrenamiento fue la tele nacional: desde finales de la década pasada, pasó por multitud de series como montador, productor o mezclador de sus bandas sonoras. Su currículo es infinito e incluye series tan populares como La señora, Tierra de lobos, Gran Reserva… Él se siente orgulloso en particular de dos proyectos recientes como Isabel y Carlos, Rey Emperador, en los que tuvo ocasión de grabar con la Orquesta y Coro de RTVE. «Con los presupuestos españoles, hacer una serie completa con música orquestal es un trabajo muy arduo -señala-, pero a pesar de todo, muy gratificante».

Onyekwere aparece en los créditos de La La Land como «editor musical adicional». Es un orgullo, afirma, y algo que le reportará, seguramente, conseguir jugosos nuevos trabajos, pero ya había trabajado antes en Hollywood y en producciones de presupuesto contundente: se puede rastrear su nombre en Exodus: Dioses y reyes, de Ridley Scott, o en la reciente Independence day: contraataque. Fue mientras trabajaba en esta última cuando el jefe de posproducción de La La Land le pidió su ayuda.

La pregunta es: ¿a qué se dedica exactamente un editor musical? ¿Cuál fue la labor de Anele en la película favorita de estos Oscars? «Como editor musical, una de las labores principales es ajustar la música ya grabada a las secuencias. Las películas siguen evolucionando después de que se graba la música, las secuencias se alargan o se acortan, y nosotros adaptamos esas músicas para que sigan funcionando tal y como el compositor y el director quieren».

Siga, por favor. Algún ejemplo concreto. «Imagina que una secuencia se acorta para que el diálogo quede mejor. La música grabada con esa secuencia no funcionaría porque la longitud es distinta. El trabajo sería adaptarla para que siga teniendo sentido musical y siga marcando los momentos que el compositor y el director quería que se marcaran». Suena bien. Tiene sentido.

En la familia Marvel

Quizá a algún otro ingeniero el desafío le habría dado miedo: trabajar en un musical requiere un especial sentido del ritmo y la coordinación. Para Onyekwere no fue un problema porque le encanta el género. «Conozco los musicales en profundidad casi desde que era un adolescente. En realidad, me sentía muy tranquilo solo tirando de mi experiencia y de mi intuición». Después de echar un cable en La La Land, trabajó en Doctor Strange, de Marvel, por la que estuvo nominado a los Golden Reel Awards (los premios del sindicato de editores de sonido de EEUU) . «Ahora estoy trabajando en Thor: Ragnarok, y ya formo parte del equipo de Marvel Studios. Para mí, otro sueño hecho realidad».