El quinteto español "B vocal" aterrizó por primera vez en Moscú con su particular mezcla de música a capella y humor para sumar al exigente público ruso a su larga lista de conquistas internacionales.

Los cinco integrantes del grupo aragonés venían prevenidos -"Nos han dicho que el público ruso es muy especial", dijeron a Efe- pero decididos a ganárselo con su cóctel de excelentes voces, variedad de estilos y humor blanco comprensible en cualquier lugar e idioma.

Durante tres días, -desde ayer y hasta este sábado- los "B vocal" ofrecen 9 actuaciones en diferentes escenarios urbanos del centro de Moscú, dentro del Festival a capella de Primavera en el que compiten 168 agrupaciones de todo el mundo, entre ellas 70 rusas.

"No solemos ir a concursos, eso ya lo hemos pasado, pero esta es una experiencia que trasciende un poco a la simple competición. Rusia es un nuevo mercado que queremos descubrir, Moscú son esas lucecitas que veíamos desde el avión cuando vamos a China, y queríamos verlas de cerca", afirma Augusto González, uno de sus cinco integrantes.

"Tratamos de adaptarnos en cada lugar, de hacer algún tema de ese país y por eso aquí vamos a 'perpetrar' Kalinka. El público siempre agradece el esfuerzo. Y en cuanto al humor, es un idioma bastante internacional", señala, por su parte, Juan Luis García.

En países como China y Corea del Sur -"a Corea del Norte aún no hemos llegado"- donde tienen una presencia estable con giras anuales, se atreven hasta con bromas en sus idiomas, y en Moscú, en sus primeros conciertos, ya han hecho sus pinitos acompañando sus temas vocales con saludos en ruso con acento de espía soviético.

En su primera actuación, a los pies de la estatua de Marx y enfrente del teatro Bolshoi, sorprendieron a los viandantes con un repertorio ecléctico donde no faltaron las famosas "Kalinka" y "Katiusha", pero tampoco "September" de Earth, Wind and Fire, "All of me", de John Legend o "Roxane" de Police.

El sabor latino lo pusieron con "Devórame otra vez" y el español con unas bulerías acompañadas de baile y capote de torero, en las que causa sensación la increíble imitación vocal del sonido del cajón, una originalidad de los aragoneses, que aseguran que "no hay ningún otro grupo a capella que cante flamenco".

Una polifonía del siglo XVI y una siempre espectacular exhibición de "beatbox", junto a un mix de "Hakuna matata" y El ciclo de la vida" de El Rey León completaron media hora de constante sorpresa para el público.

"Es como una montaña rusa, el público no sabe lo que viene a continuación y esa es parte de la gracia", cuenta Alberto Marco, que junto a Carlos Marco y Fermín Polo completan el prolífico quinteto.

Para este grupo, que lleva más de dos décadas en los escenarios con los mismos componentes, y más de 3.000 conciertos en España, Europa y Asia, es un reto actuar ahora en Rusia y un "orgullo" representar a su país en una competición con casi dos centenares de agrupaciones, entre ellas muchas rusas.

Convertidos en referente nacional de la música a capella en España, y aunque ya habían sido premiados en 2006 en Viena, su proyección internacional la abrieron realmente en Estados Unidos, donde ganaron en 2010 en el prestigioso festival Harmony Sweepstakes, el más importante del mundo en esta especialidad, tras lo cual Asia empezó a interesarse por el quinteto.

Cuando concluya esta cita moscovita, regresarán a España para preparar sendas temporadas de cuatro semanas en el Teatro Bellas Artes de Madrid y tres semanas en el Teatro Condal de Barcelona con su espectáculo "Con un canto en los dientes".

Después de ello, harán una nueva gira en China en agosto y en Corea del Sur en septiembre.