El cine catalán celebra hoy su fiesta anual, la que será ya la 10ª edición de los Premios Gaudí en la que una de las favoritas es Incierta gloria, con producción aragonesa y rodada en buena parte en la comunidad. El poder transformador del cine será el hilo conductor de la gala, que, inspirada en una frase de Georges Méliès, tendrá como lema ¡Deixeu-nos somiar! (¡Dejadnos soñar!). El aniversario de los premios se hará notar durante la ceremonia, que homenajeará a las nueve producciones que han conseguido el Gaudí a la mejor película. En lo que se refiere a los favoritos, parten con mayor número de candidaturas la comentada Incierta gloria, de Agustí Villaronga, y Verano 1993, de la debutante Carla Simón, con 16 y 14 nominaciones respectivamente. Les siguen los filmes de Coixet, La librería, con 12, y Tierra firme, de Marques-Marcet, con 11. Estas cuatro películas compiten en categorías (hay un total de 22) como dirección, guion, dirección de producción, fotografía, vestuario, sonido. No pugnan entre ellas por ser la mejor película, pues los Gaudí distinguen entre filmes en catalán y en lengua no catalana. La primera categoría se la disputan Brava, Verano 1993, Incierta gloria y La película de nuestra vida. Júlia ist, La llamada, Tierra firme y La librería optan al premio en lengua no catalana.