La Facultad de Filosofía Letras de la Universidad de Zaragoza se llenó ayer de empresas dedicadas al sector creativo y cultural en Aragón. El objetivo del I Salón de Industrias Culturales y Creativas de Aragón (CulturSIC): dinamizar el apoyo institucional y empresarial a la cultura, incentivar el emprendimiento en esta área, así como fortalecer la imagen cultural de Aragón. Por eso quedó patente la necesidad de profesionalizar este sector y sobre todo vincularlo al mundo de la empresa.
De hecho, la cultura supone un 2,6% del PIB europeo y da empleo a más de cinco millones de personas en Europa. Son las cifras que puso sobre la mesa la directora del Máster Propio en Gestión de Políticas y Proyectos Culturales de la Universidad, María Ángeles Naval. Desde el IAF, también presente en CulturSIC, consideran la cultura un motor más del desarrollo socio-económico de Aragón, y «gracias a nuestro programa de emprendimiento de industrias creativas y culturales casi una decena de las 18 iniciativas que se presentaron se han convertido ya en empresa», según explicó Ramón Tejedor, su director durante la inauguración de CulturSIC.
También desde el departamento de Cultura del Gobierno de Aragón ven la necesidad de vincular la cultura al ámbito de la empresa y la actividad económica. El director general de Cultura y Patrimonio del Gobierno de Aragón destacó el aumento en cuanto a las ayudas proporcionadas por su departamento porque «hace que los profesionales del sector tengan mayores oportunidades de empleo». Se trata, dijo Nacho Escuín, «de un cambio en la apuesta por los creadores de cultura de nuestra comunidad».
En total han sido 57 empresas las que han participando en esta primera edición de CulturSIC, un evento que nace con vocación de continuidad por el éxito registrado nada más nacer, avanzó María Ángeles Naval.
Y es que Europa es uno de los mayores productores de contenido cultural, según reconoció Pau Rausell en la conferencia inicial. Habló de las posibles vías de financiación, descartando fórmulas como el mecenazgo y contemplando otras como el crowdfounding. Pau Rausell, economista, doctor y profesor del departamento de Economía Aplicada de la Universidad de Valencia, destacó la penosa situación economía por la que ha pasado la cultura española durante los últimos años, que ha sido peor que en otros países europeos donde las industrias culturales han sido más «resilientes.
Todos los participantes coincidieron en la necesidad de vincular la industria cultural con la capacidad económica de la empresa, y por ello es «muy importante que se desarrollen iniciativas como esta, que propician la relación entre el emprendimiento y la cultura, y es una forma de que estudiantes de este sector y empresas interactúen», destacó Yolanda Polo, vicerrectora de Cultura y Proyección Social de la Universidad de Zaragoza.
La programación se completó con un encuentro entre gestores de empresas culturales y creativas, representantes institucionales de cultura y empresas.
