Una escultura del artista Henry Moore y una pintura de Joan Miró, que se vendieron el pasado martes en Londres por 19 y 16,8 millones de libras (22,9 millones y 20,2 millones de euros), respectivamente, han puesto de manifiesto la buena salud del mercado del arte a pesar de la crisis. Las dos piezas se subastaron como parte de una impresionante puja de arte impresionista y moderno en la casa de subastas Christie's que también vendió con éxito varias obras de la colección privada de la actriz Elizabeth Taylor. Sin embargo, ayer tuvo lugar en Sotheby's también en Londres, otra subasta con La peinture, también de Miró, como pieza estrella; sin embargo no encontró comprador.

En Christie's, la escultura de bronce Recycling Figue: Festival, que el artista inglés Henry Moore realizó en 1951, fue la gran sorpresa de la noche en la sala de subastas, abarrotada por los compradores y los aficionados. Su precio final fue de 19 millones de libras, muy por encima de su estimación máxima de 5,5 millones de libras.

Por su parte, el óleo Painting-

Poem , de Joan Miró, alcanzó también un récord para una obra del artista español al venderse por 16,8 millones de libras. El cuadro pintado en 1925 por el catalán pertenecía a un coleccionista privado de Nueva York (Estados Unidos) y contiene unos versos escritos sobre un fondo color arena y trazos abstractos.

El anterior récord para una obra de Miró fue el alcanzado en 2008 por La caresse des étoiles en una subasta en Christie's en Nueva York, donde fue vendido por 17 millones de dólares

Otra de las joyas de la puja de esta noche fue la pintura de Juan Gris Le Livre, aunque finalmente no consiguió alcanzar una estimación muy alta de 22 millones de euros, pero que se convirtió en la cuarta obra más cara del pintor cubista.

Esta pintura, de 73 x 60 centímetros, marca un punto de inflexión en la trayectoria del pintor, que en ese momento de su carrera comenzó a adoptar la abstracción como método de composición en sus obras. El colorido cuadro de Gris pertenecía a una fundación suiza y fue exhibido por última vez en una gran retrospectiva del artista que se pudo ver en 2005 en Madrid.

ELIZABETH TAYLOR La mitomanía y el valor de las obras ayudó a que brillaran de manera especial los tres lotes dedicados a la colección privada de la actriz Elizabeth Taylor. El más importante de la colección, Vue de l'Asile de la Chapelle de Saint-Remy, de Vincent Van Gogh, se vendió 12,16 millones de euros durante una puja frenética que consiguió superar en más de tres millones el precio máximo estimado. Autorretrato, de Degás se vendió por 857.000 euros; y Manzanos de Eragny, de Pissarro, por 3,54 millones de euros.