Más de 300 objetos, entre manuscritos de canciones, trajes originales, artículos de moda, fotografías, películas, vídeos musicales, escenografías, instrumentos y portadas de álbumes, conforman la exposición David Bowie is, que trazan la vida del cantante británico en el Museo del Diseño de Barcelona.

Esta gran exposición, que se abre hoy y se podrá ver hasta el próximo 25 de septiembre, es una producción del Victoria & Albert Museum (V&A) de Londres, donde se inauguró en 2013, y desde entonces ha sido vista por un millón y medio de visitantes en las nueve ciudades de todo el mundo en las que ha estado, en países como Canadá, Australia, Brasil o Japón.

Esta retrospectiva sobre David Bowie supone «una experiencia audiovisual completa gracias al uso de la tecnología multimedia utilizada», subrayó ayer uno de los comisarios del V&A, Geoffrey Marsh.

El enfoque principal de la exposición reside en la diversidad de la obra de Bowie y en la estrecha interacción de diversas disciplinas y modos de expresión.

Su música e individualismo radical no solo fueron influenciados por diversos movimientos artísticos, de la moda, el diseño y la cultura contemporánea, sino que Bowie dejó también su propia impronta en ellos.

En la exposición se pueden contemplar más de sesenta atuendos usados por Bowie en los conciertos, incluyendo los monos de Ziggy Stardust (1972), diseñados por Freddie Buretti; las extravagantes creaciones de Kansai Yamamoto para la gira Aladdin Sane (1973); y el abrigo con la bandera británica diseñado por Bowie y Alexander McQueen para la portada del álbum Earthling (1997).

También se exhiben fotografías de Brian Duffy, Terry O’Neill y Masayoshi Sukita; ilustraciones para portadas de discos hechas por Guy Peellaert y Edward Bell; o fragmentos de películas como El hombre que cayó a la Tierra (1976) o Saturday Night Live (1979). Esta inmersión es posible a través de vídeos musicales y objetos personales del artista.