El sueño de los seguidores de los Rolling Stones podría no cumplirse y es que el concierto que sus satánicas majestades iba a ofrecer el próximo 16 de agosto en la Feria de Zaragoza, dentro de la gira On stage (En escena), todavía está en el aire y los presagios no son nada positivos. El pasado 24 de enero se dio a conocer que la banda volvería a actuar en la capital aragonesa y a finales de mes la Sociedad Zaragoza Cultural aprobó el modelo de contrato remitido por la oficina del grupo en el que se marcaban las condiciones del recital, sin embargo, el acuerdo sigue sin firmarse.

"Las cláusulas, exigencias y requisitos estaban acordados y cerrados también los acuerdos de patrocinio (Ibercaja y la Expo 2008), sin embargo se está retrasando la llegada del contrato", explica Rosa Borraz, concejala del Ayuntamiento de Zaragoza.

El problema parece ser que la oficina de la banda británica estaría pensando en trasladar el concierto a otra localidad española, que ofrece mucho más dinero que el pactado previamente en Zaragoza (2.700.000 dólares --caché de los Stones-- más los costes de producción). "Nosotros no vamos a aceptar el cambio de condiciones y, por supuesto, no vamos a pagar ni un euro más; porque todo se estaba llevando con gran normalidad, pero son ellos los que no cierran la oferta". Borraz no quiere decir qué localidad compite con la capital aragonesa "porque no lo sabemos de forma oficial, sino que nos hemos enterado por terceras personas; lo único que sabemos es que ofrecen bastante más dinero".

"NO ES UNA SUBASTA

Además, desde el consistorio se ha comunicado a los representantes de Mick Jagger y los suyos que, si en el plazo de una semana (desde ayer) no hay una respuesta favorable, se darán por rotas las negociaciones. Este hecho se le ha dado a conocer Gamerco (organizador de la gira española), que se han limitado a apuntar: "No sabemos nada ni estamos al corriente".

Michel Zarzuela, jefe del área de Cultura del consistorio, reconoció que "hay que plantar cara y ser firmes porque el concierto no puede convertirse en una subasta", puesto que ya se había acordado todos los detalles "y no queremos que nos utilicen". De hecho, fueron los representantes de los Rolling quienes "se pusieron en contacto con nosotros" tras el éxito obtenido en el 2003, cuando el grupo mostró su satisfacción por la acogida del público y la organización del evento.

La experiencia del Ayuntamiento de Zaragoza ante el concierto de sus satánicas majestades hace que se reconozca que "es un tinglado gordo". Pero aún así quieren repetir: "Pensábamos que como ya vinieron sería más fácil, pero no es así". La cuestión es que los representantes de los Rolling tienen una semana para contestar. "Ellos son los que tienen la pelota sobre el tejado", asegura Zarzuela y aunque reconoce que "no desechamos el traerlos"; hace hincapié en la defensa de las condiciones económicas pactadas ya que "el uso del dinero público no puede jamás verse afectado por este tipo de situaciones inaceptables, rayanas en la extorsión", afirman desde el ayuntamiento.

Además, señalan que la dinámica actividad cultural y de grandes conciertos que se celebrarán en los próximos dos años con motivo de la Expo 2008 obliga también a una importante reflexión sobre "la gestión de recursos públicos sin ceder a chantajes o a tentaciones de despilfarro".