En los 17 años que van desde la creación del museo Pablo Gargallo de Zaragoza hasta el año 2002 se habían incorporado un total de 32 obras. Ahora llegan otras 25 nuevas piezas de una vez, que vienen a cubrir ciertas épocas y temas que no estaban representados.

Rafael Ordóñez, responsable cultural del ayuntamiento, destacaba ayer cuatro grupos en el nuevo legado de Gargallo: las piezas de la etapa de su independencia profesional, a partir de 1904, (bañistas, faunesas, esclavas, torsos...; y la obra del medallista, en los años 1906-07 (efigie de Enrique Borrás). La máscara de Pierrot es la única convexa en el período en que trabajaba con volúmenes cóncavos ,

Una tercera serie son los relieves en chapa repujada entre 1915 y 18, época de enfermedad. La cuarta parte la componen los retratos (de Maurice Raynal, el doctor Reventós, el pintor Xavier Nogués y la máscara de Picasso.

Entre los dibujos, se encuentran el retrato que con 17 años hizo a su tío, Ceferino Pallás, el ´Pastor con bueyes´ o la ´Cabeza de mujer´, una acuarela de 1904, época de la que el museo sólo conservaba otro dibujo de Gargallo.