McMeekin rechaza en esta reciente obra reciente el marco conceptual marxista, «de la idea de la lucha de clases entre proletarios y capitalistas a la evolución dialéctica entre una revolución burguesa hasta una socialista». En su opinión, el impacto de la guerra y el apoyo alemán a los bolcheviques fue «más significativo» que cualquier doctrina política que se pueda señalar. El historiador lamenta la «gran tragedia de los liberales rusos» y se posiciona contra el revival socialista en Estado Unidos.