El proyecto "Utopía Mudéjar", del grupo aragonés de folk Biella Nuei, ha mantenido su apuesta, en su segunda edición, por fomentar la convivencia intercultural y el mestizaje en Zaragoza y Aragón a través del teatro, la danza y la música, que deben ser herramientas de educación e inclusión social.

Desde que arrancó el pasado mes de octubre hasta el próximo mes de enero se ofrecen una treintena de conciertos teatralizados para niños en todos los barrios de la ciudad, con la representación de la obra "El tesoro de Saraqusta", ilustrada por David Guirao, que culminará el próximo 3 de enero con la presentación del disco "¡Bailamos!" de Biella Nuei y los Bufacalibos.

El consejero de Cultura de Zaragoza, Fernando Rivarés, junto con los miembros de Biella Nuei Inma Carné y Luis Miguel Bajén han dado a conocer este proyecto de carácter multidisciplinar, en el que conviven música, poesía, teatro e ilustración, que permite conocer a los niños "cómo éramos y cómo seguimos siendo" en la ciudad de las tres culturas.

El objetivo de "Utopía Mudéjar" es revivir la Zaragoza de las tres culturas y que su herencia se convierta en una llamada a la convivencia y los valores del intercambio cultural.

Luis Miguel Bajén ha explicado que los conciertos de este proyecto, en los que entre otros cuentan con el músico de origen marroquí afincado en Zaragoza Mustapha Ghouzal, sirven para mostrar "la variedad del origen de la gente que vive en Zaragoza que la hace una ciudad mestiza", a través de un cuento dividido en una parte ilustrada y otra teatralizada y musical, además de los bailes.

También ha recordado que el mudéjar supone "la cristalización de la convivencia", y con su escenificación y la integración de los niños en el espectáculo se trata de que conozcan la vida de la ciudad.

El proyecto "Utopía Mudéjar" se fija en la herencia andalusí y mudéjar, en una época de convivencia intercultural, que sirve para promover a través de esa tradición "una sociedad más tolerante e inclusiva".

Además de la representación teatral y de los bailes, a los educadores de los colegios se les ofrece la posibilidad de explicar la historia a través de fichas didácticas, ya que la convivencia de esas tres culturas hizo de Zaragoza una de las capitales de Al-Ándalus más importantes.

La idea de este proyecto, ha apuntado Bajén, surge tanto de la historia de Aragón como el descubrimiento de "la colección más amplia de Europa" de tambores andalusíes del siglo XI en el barrio de San Pablo de la capital aragonesa, que ponen de relieve el carácter híbrido y ecléctico de esa etapa histórica.

También se ha destacado que la convivencia permite conjugar los elementos que unen las culturas y tradiciones orales que perviven tanto en Aragón como en el norte de África, y para lograrlo parten de instrumentos, escalas, cadencias y canciones.

Por todo se ha mostrado convencido de que "la utopía mudéjar es posible" y tratan de trabajar y centrar los esfuerzos en la población más joven "educando en el conocimiento" y no caigan en la "guerra de odios que reina hoy".