La artista plástica canaria Concha Jerez (Las Palmas, 1941), destacada representante del arte conceptual y pionera en el uso de las nuevas tecnologías y las redes sociales, obtuvo ayer el Premio Velázquez de Artes Plásticas 2017, que concede el Ministerio de Educación, Cultura y Deportes. El jurado distinguió la obra de Jerez «por el rigor y compromiso de sus arriesgados planteamientos estéticos, desarrollados durante más de cinco décadas tanto en España como en el contexto internacional, así como por el carácter innovador de sus propuestas intermedia». «También es sobresaliente -añade el fallo- su influencia en varias generaciones de creadores, su vocación docente y su compromiso con la comunidad artística».

«Mis obras son algo natural que sale en un momento determinado, como cuando empecé a hacer obras con escritos autocensurados. Para mí aquello era natural porque estaba viviendo en una dictadura franquista, que no estoy muy segura si se ha cerrado todavía», declaró la artista tras conocer la noticia.

El jurado que otorgó el galardón, presidido por Luis Lafuente, director general de Bellas Artes y Patrimonio Cultural, estaba también compuesto por Miguel Álvarez-Fernández, Juan Antonio Álvarez, Daniel Ángel Castillejo, Aníbal Alfredo Emilio Yazbeck, Glòria Picazo y María Inés Rodríguez. El premio está dotado con 100.000 euros.

CREACIÓN Y DOCENCIA

Jerez ha compaginado en las últimas décadas su producción con la docencia, siendo profesora asociada de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Salamanca entre 1991 y 2012. «Uno tiene que reflexionar mucho para enseñar a los demás y para ver, cuando te presentan una obra de creación, qué es lo esencial y no imponer tus criterios, sino ver lo que quiere la persona que tienes delante. Y, desde el origen de lo que quiere hacer hasta lo que hace, comprobar si hay una fluidez y hay un diálogo; yo siempre me he considerado como una asesora docente», apuntó la artista.

Desde 1976, su obra explora el territorio de la instalación in situ a través de proyectos de gran envergadura. Se caracteriza por la utilización de un amplio repertorio de intereses y medios que abarcan la imagen fija y en movimiento, el texto impreso y el trazo, la palabra y el silencio, el ruido y la música, los objetos encontrados, las acciones y la performance, siempre en diálogo con los espacios físicos.