El 22% de las personas que se dedican al sector cultural en Zaragoza no obtienen remuneración por su trabajo. Este es uno de los datos más destacables de un estudio que ha realizado el Ayuntamiento de Zaragoza y de cuyas conclusiones ha surgido una nueva iniciativa: Zaragoza Acompaña, un servicio de asesoría para los agentes culturales que se presentó ayer en el Museo Pablo Gargallo y cuya sede está en el vecino torreón de Fortea. Al acto acudieron alrededor de una treintena de personas relacionadas con el mundo de la cultura a la que se les explicó esta iniciativa de la concejalía de cultura de la ciudad.

Las principales líneas de apoyo previstas para las empresas dedicadas a la cultura son: un servicio de información sobre convocatorias de empleo, ayudas y formación; un servicio personalizado de asesoramiento para la creación de proyectos culturales; un servicio de acompañamiento para empresas que nacen o que se quieren expandir; un servicio de documentación con un fondo de más de 300 obras que estarán disponibles tanto físicamente como en la web; y cursos de formación y talleres para mejorar competencias profesionales. El objetivo final, según Fernando Rivarés, concejal de Cultura, es «ayudar al sector cultural a que se profesionalice y que la gente del sector pueda vivir de su trabajo».

«Hace mucho tiempo habíamos detectado que había una necesidad vital de ayudar al sector cultural», dijo ayer también Rivarés. Entre los asistentes a la exposición del plan la sensación general fue de satisfacción, ya que «era una demanda extendida en el sector tanto para los proyectos emergentes como para los que acaban de nacer, porque el emprendimiento cultural es frágil», decía la propietaria de una empresa de gestión cultural. No obstante, también hubo gente que quiso dejar constancia de que para que esta iniciativa funcione «dependerá más de los que estamos en el tejido cultural y que nos involucremos en esto».