"Zaragoza no se rinde" "Viva Zaragoza", iba diciendo el General Palafox mientras un grupo de sus soldados lo llevaba en volandas. Y ciertamente la ciudad no se rindió sino que capituló, entregó sus armas a cambio de una serie de condiciones --que luego no se cumplieron-- a la altura del castillo (hoy palacio) de la Aljafería. Ayer, la sede de Las Cortes se convirtió en el campo de batalla. Los contendientes llegaron cansados y magullados de los combates del sábado y, tras un desfile, se enfrentaron cuerpo a cuerpo en el foso y en la entrada del castillo; una zona abarrotada de gente desde primeras horas.

La recreación de Los Sitios ha sido un gran éxito y las cifras así lo atestiguan. Más de 100.000 personas asistieron durante el fin de semana a la reconstrucción de la historia, a las que hay que sumar otras 22.000, que se acercaron al campamento y al Mercado napoleónico situado en la plaza de Los Sitios.

"No sabía yo que despertaba esto tanta expectación", decía una asistente, situada en la quinta fila. Y es que para ver bien había que madrugar. "Hemos venido poco después de las diez y aunque la espera se hace larga, merece la pena porque se ve todo", decía otra. Niños y mayores disfrutaban de la recreación y sobre todo de los cañonazos (con pólvora real) que sobrecogían a los más pequeños y admiraban a los mayores. "Vaya, no me extraña que ganaran, menudos petardazos. Si te cogen...", señalaba un joven. Al lado, una mujer destacaba la importancia de estos actos para que "los niños aprendan la historia, porque así se hacen una idea más acertada, mejor que en los libros; y ayuda también que no se vuelvan a repetir errores". Junto a ella, otra afirmaba con la cabeza.

La próxima cita con la historia, el año que viene, cuando Zaragoza volverá a recordar la época romana; para la francesa habrá que esperar al 2017.