La igualdad entre hombres y mujeres es una meta a la que se puede y se debe llegar si se aspira a conseguir una sociedad más justa. Para lograrlo se impone la necesidad de concienciar sobre la injusticia que suponen las inequidades de género desde la niñez. Y eso es lo que ayer estuvieron haciendo en Zaragoza 135 estudiantes procedentes de los colegios San Antonio de Padua, Santo Domingo de Silos y Doctor Azúa que, tras un trabajo previo online y en el aula, se reunieron para explorar de forma conjunta los Caminos de la igualdad.

Ese es el título elegido por Oxfam Intermón para designar este año su propuesta educativa Conectando Mundos, dirigida a estudiantes de Primaria y Secundaria. En las ocho semanas previas al encuentro de Zaragoza, los centros participantes han estado reflexionando y debatiendo sobre la construcción cultural del género y cómo esta puede ser motivo de desigualdad entre las personas.

En este periodo, los alumnos han abordado diferentes bloques temáticos en función de sus edades: la construcción de la identidad, las relaciones interpersonales, los roles y estereotipos de género y la igualdad de derechos.

El objetivo ha sido invitar al alumnado a trabajar por el cambio hacia una sociedad igualitaria. Para ello, a través de las actividades propuestas por la oenegé, se ha contribuido a que los alumnos y alumnas desarrollen su propia identidad de forma saludable, rompiendo estereotipos, aceptando la diversidad e identificando las desigualdades de género.

Conectando Mundos es una propuesta educativa telemática de Oxfam internacional que combina la actividad en el aula y el trabajo en red entre niños y jóvenes de 6 a 17 años procedentes de diferentes realidades culturales, económicas y sociales, y en la que participan centros de todo el mundo. En esta 13ª edición han concurrido estudiantes procedentes de nueve de países, entre ellos España, Italia, Portugal, República Dominicana o Venezuela, elevando la cifra total de participantes a 14.631 estudiantes de 310 centros educativos.

Desde que un equipo de docentes y profesionales de Oxfam Intermón impulsó Conectando Mundos, hace ya 13 años, han participado 127.000 estudiantes en más de 1.700 centros educativos de 41 países diferentes. Esta diversidad ha convertido a Conectando Mundos en una plataforma de referencia para el trabajo intercultural. Después de más de una década, la propuesta continúa vigente, planteando cada año una temática concreta relacionada con la educación para una ciudadanía global, como los derechos laborales, el cambio climático, las migraciones, la cultura de paz, la justicia alimentaria o la pobreza.

"Conectando Mundos da un paso más allá de la sensibilización, ya que el alumnado que participa no solo reflexiona con espíritu crítico sobre la injusticia y sus causas, compartiendo puntos de vista con otros estudiantes, sino que se plantea y lleva a cabo alternativas de acción", explica Anna Duch, responsable de la Unidad de Educación para una ciudadanía global de Oxfam Intermón.

El rol del docente es diferente al tradicional y se orienta hacia la figura facilitadora de procesos, es decir, anima los debates, inspira la reflexión, investiga y descubre cosas junto a sus alumnos... El 80% del profesorado que participa en la actividad considera que la propuesta provoca cambios en la actitud del alumnado respecto al tema que han tratado, además de incidir de manera positiva en las relaciones en el aula. El índice de repetición es del 30%, y el 10% ha repetido más de cuatro veces.

"Compañeros que ya habían participado en otras ediciones me animaron a implicarme. Es una buena forma de inculcar valores que no se incluyen en el programa de ninguna asignatura. Todos lo hemos pasado bien, alumnos y profesores concienciándonos a la vez sobre problemas importantes", apunta Silvia Navas, profesora del colegio Bérriz de Madrid.

Conectando Mundos combina la actividad en el aula con el trabajo colaborativo online. Para ello, los estudiantes se conectan a través de una plataforma telemática multilingüe en ocho lenguas (italiano, castellano, portugués, inglés, francés, gallego, catalán y euskera), en la que trabajan de manera cooperativa, organizados en equipos de trabajo de la misma franja de edad.

En España, cuando acaba la actividad