Atades presentó el pasado viernes en la comarca pirenaica de La Jacetania Cielos de Ascara, un proyecto de alto impacto social, vertebración del territorio y recuperación del patrimonio natural y cultural. Esta iniciativa trabaja en la recuperación de cultivos autóctonos en vías o peligro de extinción y en la agricultura y apicultura ecológicas, entre otras áreas de actuación, mediante la formación, contratación e integración de personas con dificultades de inserción sociolaboral.
Hasta el momento, y cuando el proyecto está recorriendo sus primeras etapas de implantación, Cielos de Ascara ha conseguido la contratación de casi una veintena de personas, además de su formación homologada, y ha impulsado el salto de varias más al mercado laboral ordinario en diferentes áreas de producción.
Con más de 200 hectáreas de cultivos y monte bajo y algunas edificaciones singulares, dedicadas a tareas agrícolas, en Cielos de Ascara se trabaja desde hace meses en la recuperación y cultivo de semillas de boliches, legumbres autóctonas, algunas de ellas en extinción, encinas micronizadas para el cultivo de trufa, fruta de montaña, cereales y otros cultivos.
Además, el proyecto ha avanzado ya una experiencia de apicultura ecológica, gracias a talleres ocupacionales mediante los que se ha realizado ya la primera trashumancia de las abejas entre Farlete, en los Monegros, y Ansó y Ascara, en el Pirineo, donde se producen ya las primeras cosechas de miel ecológica Legado de Ascara.
La implicación social del proyecto, así como su potente efecto dinamizador en las comarcas pirenaicas, han propiciado que el Centenario del Parque de Ordesa y Monte Perdido asuma este proyecto como propio, dentro de su programa de responsabilidad social corporativa.
El origen del reto que ahora nace se sitúa en la herencia solidaria de una familia de Ascara. Atades lo ha puesto en marcha con el respaldado de su centro especial de empleo Gardeniers, y gracias a la colaboración del Instituro Aragonés de Empleo (Inaem), mediante el taller ocupacional Jambre de Abejetas. Cuenta con el soporte del Ayuntamiento de Jaca y las comarcas de La Jacetania y el Alto Gállego.
