Según Quique Dacosta, «no hay nada que sensibilice más a un cocinero que alguien que pase hambre. Nuestra acción natural es alimentar». Así explica el chef su motivación para convertirse en embajador de Acción contra el Hambre, organización con la que ha viajado durante cuatro días a una de las regiones más golpeadas por la desnutrición infantil en África: el norte de Senegal.
«Lo que más me ha marcado de este viaje ha sido entender la nutrición como pilar para construir un pueblo, y la capacidad de Acción contra el Hambre de tejer argumentos que sirvan para que el pueblo prospere», explica el cocinero, cuyo restaurante en Denia (Valencia) ostenta tres estrellas Michelin, y está entre los 50 mejores del mundo.
Durante su viaje, Quique Dacosta visitó varias localidades en la región de Podor, donde los índices de desnutrición rebasan el 18%, superando el umbral de emergencia establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Allí comprobó cómo funciona un tratamiento nutricional para salvar la vida de un niño con desnutrición aguda. El chef conoció además el trabajo que Acción contra el Hambre realiza en centro de salud de Dodel para detectar y diagnosticar a tiempo la desnutrición infantil, y tuvo la oportunidad de visitar un huerto nutricional en Boki Ndoula, donde la organización desarrolla proyectos de seguridad alimentaria para prevenir la desnutrición en una zona que cada vez cuenta con menos medios de vida por el avance de la desertificación.
«Al venir a terreno siento más aliento, siento más posibilidades de hacer, lo puedo entender más», recalca Dacosta, que asegura que emprendió el viaje con la intención de «aprender, conocer y, a partir de aquí, ver qué más puedo hacer cuando reflexione sobre ello. Intentaré desde allí devolver buena parte de lo que me llevo o multiplicarlo por todo lo que pueda».
Dacosta será el nuevo padrino de Restaurantes contra el Hambre, iniciativa con la que ha colaborado en los últimos cuatro años. Como padrino, tendrá un papel crucial en los próximos meses para animar a hosteleros y restauradores de toda España a sumarse a la campaña, que tendrá lugar del 15 de septiembre al 15 de noviembre. En el 2016 participaron más de 1.200 restaurantes de todo el país, una treintena de ellos en Aragón.
Los establecimientos partipantes indican en su carta cuáles son los platos que más alimentan, esto es, aquellos por los que destinan entre 0,50 y 2 euros para la prevención, diagnóstico y tratamiento de la desnutrición infantil, a través de Acción contra el Hambre.
Dacosta asegura que se interesó por esta oenegé «cuando se hermanó con la restauración», explica. Está seguro de que su sector puede aportar mucho porque «al fin y al cabo la cocina es un lenguaje universal».
Esta es una de las razones que le motivó a participar en la campaña Restaurantes contra el Hambre, desde la que puede decir a los demás cocineros «venid conmigo» y reclutar a más colegas. En cuanto a los clientes -los cuatro establecimientos de Quique Dacosta participaron en la edición del 2016-, asegura que «reaccionan bien. Yo creo que este es el éxito de la campaña. Sin empujarles a ningún abismo moral ni ético, simplemente su propia conciencia les lleva a participar».
